El documento ordenó a la Policía Nacional del Perú (PNP) a disolver cualquier tipo de aglomeración que acontezcan de manera previa o posterior a un espectáculo deportivo profesional.
En Perú es habitual que los seguidores radicales de los clubes de fútbol, conocidos como barristas, se reúnan horas antes del partido para acudir en grupo al estadio y cometer actos vandálicos en su ruta hacia la instalación deportiva.
El mismo reglamento establece la creación de un Registro Único de Empadronamiento de Barristas (Ruebar) con la información que proporcionen los clubes sobre sus barristas registrados.
Los integrantes de ese padrón no pueden tener menos de 16 años y aquellos que todavía sean menores de edad tendrán que contar con la autorización de sus tutores.
Los barristas empadronados tendrán un carné otorgado por su respectivo club que deberán presentar en la puerta del estadio junto a su documento nacional de identidad (DNI) y su respectiva entrada, en la que también deberá figurar su nombre.
Otra disposición de la norma es la venta de entradas nominales, en las que figurará el nombre del adquiriente, que no podrá comprar más de cinco por persona.
El gerente deportivo de Universitario, Germán Leguía, valoró a Radio Programas del Perú (RPP) la aprobación del reglamento de la ley 30037 porque recordó que el club crema se ve habitualmente impedido de jugar en el estadio Monumental debido a que los vecinos de las viviendas cercanas se quejan de la violencia de los aficionados.
“Esta ley no nos perjudica. Creo que nos va a ayudar bastante. Ojalá se ejecute y se haga efectiva para que la Policía actúe. Nosotros ya hace años que no regalamos entradas” , precisó Leguía.
