RECOMENDAMOS LEER
“Mi pareja me contó que ahí adentro hay reos que no duermen por el dolor en el estómago y la fiebre, dicen que avisaron a la Policía y que los agentes solo se ríen de ellos”, comentó Sandra, conviviente de un reo que fue capturado por robo.
Familiares de los reos denunciaron también que las personas de primer ingreso en ese preventivo son obligadas a pagar la “talacha” para no ser golpeados y llevar a cabo la limpieza de la cuadra y el rancho “baño”.
“Los derechos humanos deberían entrar y hablar con los presos porque ahí adentro se cometen abusos de autoridad y golpizas”, manifestó una familiar de otro reo que no se identificó.
No pasa nada
Delegados de la PDH en Xela efectuaron una visita al preventivo para hombres y entrevistaron a varios detenidos, también conversaron con el alcaide de ese lugar.
“Los privados de libertad negaron que exista un brote de diarrea y golpizas a los reos de nuevo ingreso. Como PDH verificamos la información de supuestos malos tratos y enfermedades, no confirmamos tales señalamientos”, detalló Karla García.
Los presos aseguraron a la PDH que cuando un reo enferma tiene un botiquín de primeros auxilios que contiene medicina diversa para aliviar las molestias.
Con relación al cobro de la “talacha”, los detenidos explicaron que han solicitado a los nuevos reos que colaboren con detergente para la limpieza de los baños, cuadras y utensilios de limpieza.
El alcaide de esa cárcel también negó los señalamientos de abuso de autoridad y expuso a la PDH que siempre que un reo necesite atención médica se coordina su traslado hacia el Hospital Regional de Occidente.
La PDH enviará un oficio con recomendaciones a la Policía Nacional Civil que está a cargo del Preventivo para Hombres en Xelajú para que se mejoren algunos de los servicios esenciales para los privados de libertad.
Prensa Libre buscó la postura del jefe de la Comisaría 41, Beder Fuentes, pero no atendió las llamadas efectuadas a su celular.
Contenido relacionado
> Río Xequijel se convierte en un río de basura
> Empresas tendrán hasta el 2020 para cumplir con estudios y licencias ambientales