El fiscal recuerda que el precio real de mercado de Neymar no eran por tanto los €17,1 millones fijados en el contrato, “sino una cantidad mayor, más próxima a los €36 millones ofrecidos por el Real Madrid”.
El Real Madrid ofreció al Santos €36 millones por el fichaje de Neymar que después prefirió aceptar la propuesta del Barcelona.
En este sentido señala además que, siendo la contratación de jugadores un trámite sencillo y rápido una vez cerrado el precio del traspaso, en este caso “la complejidad en la contratación es precisamente un indicio de la comisión del delito de estafa por haber sido buscada de propósito (…) para eludir la verdadera realidad de los contratos”.
Otro de los indicios que destaca Perals es que el Barça mantuvo oculto un documento sobre el traspaso de Neymar relativo al pago de sus derechos federativos que demostraría que hubo engaño al fondo brasileño DIS.
Este documento, que el club evitó aportar al juzgado y que apareció entre los reclamados a la auditora Deloitte, “es importante a la hora de valorar la comisión del delito de estafa, pues revela por si mismo que los dos clubes (Barça y Santos) preveían la posibilidad de que DIS, en el futuro, podría reclamar más cantidad que la que se pactaba en el contrato principal”.