Pero eso no es lo divertido, las imágenes muestra cómo reaccionarían los dos contendientes ante una llamada de emergencia en la madrugada. Hillary aparece junto a su esposo Bill, quien no deja de sentirse presidente; sin embargo, eso no es lo más gracioso. Es la presencia de Trump la que deja ver el humor ácido de Los Simpson.
Con sátira, el video desvela la rutina del candidato republicano previo a presentaciones públicas. Desde su cama Trump llama a su séquito de ayudantes que le inyectan botox y le dan color bronceado a su piel. Pero el secreto detrás de su popular cabellera se roba el show, sus empleados le acomodan un perro en la cabeza para que parezca un rubio peluquín.
Las imágenes son graciosas y tiene que verlas.