“No aceptamos ser maltratados. Nos ofrecían menos de dos millones de coronas islandesas (€15 mil 500). Les hicimos una contraoferta, pero no aceptaron”, declaró su presidente Geir Thorsteinsson.
“No sé lo que ofrecen a las otras federaciones. Dicen que nos ofrecieron lo mismo que a federaciones parecidas”, añadió.
La decisión fue criticada por un experto en marketing, Andres Jonsson, que considera que Islandia ha desaprovechado una ocasión de oro para aumentar la popularidad de su equipo, en auge tras su gran actuación en la Eurocopa 2016.
“Pienso que cientos de millones de personas utilizan este juego. Islandia es un equipo querido y podría haber llamado todavía más la atención”, dijo en la cadena de televisión Ruv.
Islandia, cuartofinalista en la pasada Eurocopa, ocupa el 27º lugar en la clasificación de la Fifa, por delante de equipos habituales en el juego como República Checa, Rusia o Suecia.