Sin embargo, la ex vicegobernadora de Maryland e hija de Robert F. Kennedy, publicó en la red social Facebook una imagen con el patriarca de los Bush dándole la mano, junto a un pie de foto que reza: “¡El expresidente me dijo que va a votar por Hillary!” .
Preguntada por el diario Politico, Kennedy explicó que se había reunido con el expresidente republicano en el estado de Maine, y explicó que éste era totalmente consciente de que apoyaría a una demócrata.
La atípica y ruidosa campaña del magnate inmobiliario ha provocado que muchos miembros y pesos pesados del Partido Republicano se hayan echado a un lado y hayan rechazado apoyar a Trump en las presidenciales.
Especialmente aquellos congresistas o senadores que se juegan la reelección en las legislativas que tendrán lugar el mismo 8 de noviembre, y cuyos estados tienen una gran población hispana, una de las principales comunidades castigadas por la retórica del multimillonario.
Magnate republicano dona dos millones a Clinton
El magnate cubano-estadounidense Mike Fernández, quien ha apoyado históricamente al Partido Republicano, instó a los latinos a votar contra Donald Trump y anunció una donación de dos millones de dólares a la campaña a la Presidencia de EE.UU. de la demócrata Hillary Clinton.
En una columna de opinión publicada el martes por el diario “Miami Herald”, Fernández hace un llamado a los hispanos a rechazar la “violencia” contra esta comunidad que, a su juicio, genera el magnate inmobiliario.
“Llamo específicamente a todos los latinos a rechazar al hombre que fomenta la violencia contra ellos” , aseguró Fernández.
El empresario donará dos millones de dólares a la campaña de la exsecretaria de Estado para el registro de votantes latinos en Florida, estado donde reside y uno de los más decisivos para las elecciones presidenciales de noviembre próximo.
Fernández, quien apoya la normalización de la relaciones con Cuba impulsada desde el 2014 por el Gobierno del presidente de EE. UU., Barack Obama, convidó además a los cubano-estadounidenses a rechazar a Trump, quien recientemente anunció en Miami que revertiría dicha apertura hacia la isla en caso de llegar a la Casa Blanca.
“Este hombre está llevando a Estados Unidos y a ustedes por el mismo camino de decepción que ustedes han vivido durante 60 años”, expresó Fernández a sus compatriotas cubanos.
El empresario, que había apoyado las aspiraciones del exgobernador republicano de Florida Jeb Bush a la Presidencia de EE.UU., aseguró que no puede apoyar a un partido que ya “no reconoce” .
“Como republicano que ha contribuido a millones a causas de nuestro partido, pregunto: Por qué nuestro partido no ha tratado de hacer una evaluación psicológica de su candidato?”, señaló en una columna.
En el 2014 Fernández, uno de los principales aliados del gobernador de Florida, Rick Scott, renunció a su puesto en la campaña para la reelección del republicano tras denunciar que su equipo no entendía la cultura de los votantes hispanos.
El empresario, que ejercía como presidente de la recaudación de fondos para la campaña de Scott, expresó su frustración en varios correos electrónicos en los que denunciaba a miembros del equipo del gobernador por imitar el acento mexicano.
“Clinton es, sin duda, una opción superior a Donald Trump”, manifestó Fernández, al señalar que el empresario inmobiliario “amenaza los valores básicos de la democracia”.
Clinton aumenta ligeramente su ventaja sobre Trump
La candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, recuperó la cota del 50 % de apoyo entre potenciales votantes y aumentó su ventaja sobre su rival, el republicano Donald Trump, que obtiene un 45 %, según una encuesta publicada hoy por NBC News.
La exsecretaria de Estado mantiene su ventaja de cinco puntos sobre Trump (45 % a 40 %) si se incluye en el cómputo a los candidatos de partidos minoritarios del Partido Libertario, Gary Johnson (10 %) , y del Verde, Jill Stein (4 %) .
La semana pasada esta misma encuesta semanal daba a Clinton un 48 % de apoyo frente al 44 % de Trump.
La ventaja de Clinton se amplía a seis puntos, frente al 43 % de Trump, si se pregunta a votantes registrados, que en la semana previa daban a la demócrata cuatro puntos de ventaja sobre el magnate neoyorquino.
Este último sondeo fue realizado entre el 12 y 18 de septiembre entre votantes registrados y potenciales, con un margen de error estimado del 1,2 %.
La mejora de Clinton en este sondeo se realizó justo cuando la exsecretaria de Estado regresó a sus actos de campaña y apariciones públicas tras pasar tres días convaleciente por una neumonía que le provocó un desfallecimiento el pasado 11 de septiembre.
Trump, a la ofensiva contra inmigración
Donald Trump volvió a encender el debate sobre la inmigración tras los atentados que este fin de semana dejaron decenas de heridos en Estados Unidos, al reanudar sus ataques contra los refugiados sirios y atribuir el caos en Medio Oriente a Hillary Clinton.
La inmigración es un tema inseparable del fulgurante ascenso político del candidato republicano a la Casa Blanca.
La gran mayoría de sus votantes apoyan su línea dura y los sondeos muestran que la mayoría de los republicanos están de acuerdo con su propuesta de diciembre de 2015 de prohibir el ingreso de los musulmanes a suelo norteamericano.
Desde entonces, Trump no hizo más referencia a los musulmanes, pero pretende que la policía tenga un registro de antecedentes de los migrantes y promete cerrar las fronteras a los que provienen de países considerados peligrosos, como Siria.
El candidato vuelve con insistencia al “caballo de Troya” del flujo de refugiados sirios, hace referencia a las infiltraciones en Europa de agentes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) y afirma que los servicios de inmigración ignoran todo sobre el pasado de aquellos que llegan a Estados Unidos.
“Debemos estar seguros de que la gente que quiere a nuestro país puede entrar” , repitió el martes en un discurso dedicado casi exclusivamente a la inmigración y el terrorismo en el campus de High Point, en Carolina del Norte.
“Es un hecho que nuestro actual sistema de inmigración no intenta determinar realmente las opiniones de las personas que entran a nuestro país, no sabemos nada de ellas ni de lo que piensan” , dijo Trump, quien volvió a leer su discurso en una pantalla (en vez de improvisar) .
El candidato republicano denuncia la política de “fronteras abiertas” , promovida según él, par su rival demócrata, a la que acusan de haber contribuido a la emergencia del grupo EI cuando fue secretaria de Estado entre 2009 y 2013.