El 2015 “marcó un cambio en la ruta de la historia de Guatemala”, afirmó Morales, y recordó que el pueblo de Guatemala “manifestó su profundo malestar con las autoridades del Estado que traicionaron la Constitución”.
El gobernante recordó que el “perverso sistema de corrupción” venía “saboteando las potencialidades de desarrollo” de Guatemala y, al final, la salida de Pérez Molina “se procesó mediante las reglas de la democracia”.
Después de las manifestaciones populares, “durante cinco meses consecutivos, el estado de Derecho es ahora ciertamente más vigoroso que hace un año en nuestro país”, añadió el gobernante.
Además, “las personas que salieron semana tras semana a manifestarse con un justo reclamo ético, ahora tienen más confianza en su propio poder transformador, y en su capacidad de identificar un país distinto”.
Morales afirmó que su Gobierno “representa una esperanza de la recuperación del Estado democrático sobre las bases éticas del bien común, que subordina al interés particular”.
En su discurso, en la tercera jornada del debate de la Asamblea General de la ONU, Morales dijo que su gestión está enfocada en cinco ejes de trabajo: la transparencia, la salud, la educación, la seguridad y el desarrollo.
Respecto a la primera, insistió en que habrá una “cero tolerancia” frente a la corrupción y promoverá un “Gobierno abierto” como uno de los pilares fundamentales de su Administración.
Desde la tribuna con la mayor protección internacional, el presidente de Guatemala quiso rendir un homenaje a los migrantes de su país que, “a través del sacrificio y el trabajo duro”, apoyan a su familias y contribuyen al desarrollo de Guatemala.
“Son ciudadanos ejemplares en cualquier parte del mundo, y por lo mismo son sujetos de derecho por una dignidad mayor”, agregó.
El mandatario también destacó el trabajo de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), quien “ha jugado un papel catalizador (…) y se ha traducido en una de las herramientas más eficientes de cooperación multilateral en la lucha en contra de las redes criminales”.
Caso Belice
Jimmy Morales incluyó en su discurso el caso de Belice y el último hecho violento que causó la muerte de un menor en la zona de adyacencia.
Aunque reconoció la voluntad de Guatemala para resolver el diferendo, el mandatario aseguró que en los últimos meses no se ha encontrado una “actitud recíproca del Gobierno beliceño”.
La muerte del menor y declaraciones e informes posteriores “dañan de manera directa la relación bilateral y obstaculizan los avances hacia la construcción de la confianza”, dijo Morales.
Su discurso lo concluyó con una felicitación al gobierno de Colombia por la culminación del proceso de paz, además de resaltar el compromiso del país en contribuir en la paz del mundo, a través de los siete contingentes que luchan en África.
