“Estamos investigando el incidente, pero varios vecinos nos comentan que la mercadería le fue destruida y subida a la unidad policial, y que se le trató de muy mala manera al joven campesino que vendía artículos de barro”, publicó El Gráfico de Oriente.
Magnolio reapareció este domingo en el punto contiguo al parque central de la cabecera departamental, pero dice temer que lo vuelvan a retirar de la misma manera, al punto que varias personas consiguieron que una psicóloga platique con el menor.
En dicha ciudad comenzó una campaña para buscar ayuda –principalmente ropa– para Magnolio, quien tiene cuatro hermanos más pequeños y de la aldea Carrizal baja todos los jueves y domingos a la cabecera para vender.
El día del incidente, el niño vendía y el vehículo de la PMT pasó encima de algunos productos de barro, lo que enojó a las personas al punto de querer pegarle al agente de tránsito, quien fue rescatado por un compañero, de acuerdo al relato de personal de El Gráfico de Oriente.
Magnolio se asustó y comenzó a llorar. Acompañado de un familiar, el mismo día llegó a la sede de la PMT para quejarse, y le dieron Q50, cuando la mercadería destruida tenía un valor de Q265, principalmente jarritas.
El niño estudia, pero falta a clases el jueves para ayudar a su familia con la venta. Su madre, hermanos y un primo llegan con él de la aldea, pero se queda solo en el parque central.
Se conoció que no hay prohibición para vender, y la municipalidad impulsa un plan de reordenamiento de vendedores.
En Chiquimula, este es solo uno de decenas de casos en donde niños y jóvenes llegan a la cabecera, procedentes de aldeas, mientras los padres se quedan trabajando en el campo.
Respuesta de la PMT
La PMT chiquimulteca informó que lo que se buscaba era desalojar a una mujer indigente que en dicho lugar llega a dejar bolsas de basura, lo que provoca malos olores y que sea ocupada esa área para hacer sus necesidades fisiológicas.
De acuerdo a la PMT, en varias ocasiones han intentado desalojarla, y el 22 de septiembre acudieron tras una denuncia de los vendedores a agentes de la Policía Municipal (PM).
“Elementos de la PM, conjuntamente con agentes de la PMT, llegaron al lugar indicado y con la unidad 001 de la PMT, manejado por el agente Aldo España, ingresaron al parque y por un error involuntario del piloto de dicha unidad se pasó arrollando una bolsa de pita que contenía mercadería de barro”, indicaron.
Al consultar al comisario Kelvyn Campos, añadió la PMT, este afirmó que se revisaron las cámaras de seguridad, y en ellas no se ve que el piloto tuviera mala intención en ocasionar daños a la mercadería del menor, ni de retirar esa venta, sino extraer la basura.
“El agente Aldo España canceló los daños ocurridos en la mercadería”, agregó la autoridad municipal.