“Es una ameba que está en los estaques, lagunas. Entra por las fosas nasales y luego llega al cerebro. Allí es donde causa el mayor daño y provoca meningitis” , dijo Diana Guerra, madre del menor, a América TV. Su hijo se encuentra conectado a un respirador artificial en una clínica de Lima.
Según declaraciones del exjefe del Instituto Nacional de Salud al diario El Comercio, la “ameba está en muchos ambientes acuáticos (…) ingresa por las fosas nasales y en muy extraños casos se adhiere al nervio olfatorio y se mete al cerebro a través del hueso etmoides. Una vez allí es capaz de segregar una encima que destruye la masa cerebral hasta producir una meningoencefalitis” .
De acuerdo con El Comercio, actualmente hay otros dos menores que están internados en hospitales de Lima con el mismo mal. El tratamiento es costoso y se extiende por medio año.
El nombre científico de la ameba es naegleria fowleri. Puede afectar a cualquier persona que se sumerja de ríos y lagos infestadas o también en piscinas que no han sido tratadas. No es exclusiva de Perú.
En agosto de este año murió una niña de 11 años y en el 2015 a otro de 14 en Estados Unidos.