Tras la pausa, Cavani sentenció para el PSG con un doblete (55 y 60) ante un Ludogorets que podría haber puesto en dificultades a los franceses si no hubiese fallado un penal con 1-2 en el marcador.
Siguendo la línea de juego en este inicio de temporada, el París SG entrenado por el español Unai Emery dio una pobre impresión en la primera parte y apenas inquietó la portería rival.
La primera jugada de peligro fue un cabezazo del brasileño Thiago Silva que se marchó fuera por poco pasada la media hora de juego (31), cuando el modesto equipo local ya estaba por delante en el marcador gracias a un disparo de libre directo lanzado por Natanael.
La suerte para el equipo francés fue que poco antes de la pausa se encontró con el empate, en una buena triangulación entre el italiano Marco Verratti, el italo-brasileño Thiago Motta y Matuidi, que superó al arquero rival con un ajustado zurdazo.
Cierto es que a medida que pasaron los minutos, el París SG se hizo dueño del balón y controló el partido, pero los búlgaros se mostraron siempre peligrosos a la contra.
Muy discreto en la primera parte, Cavani apareció en el segundo tiempo con un doblete para decidir el partido. Primero anotó de cabeza, adelantándose en el primer palo en un centro lateral del argentino Ángel Di María (55) y cinco minutos después sentenció con un remate de derecha desde el interior del área a pase del brasileño Lucas Moura.
El partido podría haber tenido otro desenlace si el Ludogorets hubiese forzado el 2-2 en un penal cometido por Motta que lanzó el rumano Cosmin Moti y atajó Alphonse Areola (59).
El París SG, con los tres puntos logrados en Sofía, lidera el grupo A con 4 puntos, empatado con el Arsenal, que derrotó por 2-0 al Basilea en Londres.
