“Todos los meses sufrimos un calvario para conseguir los Q3 mil 500 que cuestan los medicamentos, pues somos de escasos recursos y lo que gano como agricultor no nos alcanza ni para la comida”, expresó.
Bernal manifestó que cada mes deben recorrer casi nueve horas para asistir a la consulta en el Hospital Roosevelt, en la capital.
“Nos esforzamos porque nuestra hija reciba el tratamiento necesario para controlar la enfermedad y evitar que le apliquen quimioterapia, cuyo costo varía dependiendo de la evolución de la enfermedad”, añadió.
Sensible
Lilian Juan Sebastián, madre de María, explicó que la enfermedad de su pequeña se debe en gran parte a que su piel es muy reseca, sensible e intolerable al calor.
“Nuestra vida cambió desde que María se enfermó, pues debemos salir a tocar el corazón de las personas para que nos apoyen para salvarle la vida”, agregó.
La pequeña también sufre problemas de la vista; sin embargo, aseguró que está dispuesta a esforzarse para cumplir su sueño de ser maestra.
“Las maestras cuidan a los niños y los quieren mucho, por eso quiero ser como ellas, para enseñarles que deben estudiar y obedecer a sus padres”, expresó.
Para apoyar a la familia Bernal Juan puede comunicarse a los teléfonos 31099146 y 46118885.