Por medio de las escuchas derivadas del atentado contra el bus de San José Pinula , la Fiscalía de Delitos contra la Vida identificó que las instrucciones de muchas acciones de la clica Vatos Locos y de otras del Barrio 18 en Santa Catarina Pinula y Mixco provenían de Osoy Concuá.
Tomó varios meses ubicar al pandillero pues no tenía una residencia fija. Una perra pitbull blanca con manchas café fue un detalle importante para dar con su paradero.
Los investigadores se propusieron buscar un can con las características descritas en un radio en donde los pandilleros se desplazaban hasta que encontraron a la mascota en una casa cercana a Cuchilla El Carmen, en Santa Catarina Pinula.
Pese al aspecto de la perra, de la que la fiscalía no sabe el nombre, es cariñosa y juguetona. Durante los allanamientos del pasado jueves correspondía a las caricias de los policías de la División Especializada en Investigación Criminal (Deic) que con cascos blindados y chalecos antibalas rodearon la casa para capturar a uno de los líderes del Barrio 18.
La caída
La perra no fue la única causa de la detención, otros factores abonaron. 15 días antes de la captura de Paco fue detenida su conviviente Lidia Beatriz Ajún Escobar quien el viernes fue ligada a proceso por los delitos de asociación ilícita y asesinato en grado de tentativa.
Otros dos menores fueron sancionados con cinco años de privación de libertad la mañana de los operativos en que Concuá fue capturado. Fueron señalados de participar en los asesinatos de Ana Waleska Solís Loarca y Flor de María Toquer. La Fiscalía de delitos contra la Vida le imputará estos dos asesinatos a Osoy Concuá.
Los capturados enfrentan cargos por asesinato, asociación ilícita, conspiración para el asesinato, conspiración de obstrucción extorsiva de tránsito, traslado ilegal de armas de fuego, de municiones y portación ilegal.