Hasta este martes los republicanos controlaban también el Senado, aunque los sondeos indican que el Partido Demócrata tiene excelentes probabilidades de recuperar la mayoría en esa cámara alta.
Si esta última previsión se confirma, el nuevo presidente estadounidense tendrá que gobernar con mayoría en solo una de las cámaras, escenario que obligaría a los dos partidos a negociaciones permanentes.
Este martes se renuevan 34 bancas del Senado (un tercio) y la totalidad de la Cámara de Representantes.
El actual presidente, Barack Obama, obtuvo su histórica victoria en 2008, y además su partido logró hacerse con el poder en el Legislativo, lo que permitió al mandatario contar durante dos años con el favor del Capitolio para avanzar su agenda.
Sin embargo, los demócratas fueron perdiendo paulatinamente el Congreso, primero la Cámara de Representantes en 2011, y luego el Senado en 2015, donde ahora tienen 46 senadores, por 54 de los republicanos.
Entre los resultados que ya se han confirmado durante la noche electoral en la Cámara Alta, destaca la reelección del senador republicano Marco Rubio en Florida, así como de su compañero de partido Robert Portman en Ohio, mientras que la demócrata Tammy Duckworth arrebató su asiento al conservador