Según explicó Valdez a Prensa Libre, sigue al frente de la alcaldía auxiliar porque fue electo por el Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode). En cuánto a la administración de esa entidad se ha separado, demanera que sean los supervisores los que manejen los temas y no intervenir en ninguna decisión.
El contrato de Valdez había sido rescindido en la comuna luego de que Monzón declarara a Prensa Libre que mantuvo una relación de amistad y negocios con Héctor Valdez Batz, a quien acusó de ser desleal.
Días después el jefe edil anunció el despido de quien era su asesor en ese momento, persona a la que Monzón conoció como “maestro” para hacer negocios y crear plazas fantasma cuando este trabajó como administrador liquidador del Fondo Nacional para la Paz.
Mynor Espinoza, comunicador de Mixco, confirmó la permanencia de Valdez en la comuna, pero como alcalde auxiliar. Espinoza indicó que este mes entregará el cargo a quien el Concejo Comunitario de Desarrollo elija.
“No tiene ningún contrato con la comuna porque trabaja adhonorem”, enfatizó. Espinoza añadió que desde que era asesor ya trabajaba como alcalde auxiliar, con proyectos de agua potable y “atendía llamadas”.
“El alcalde no lo puede separar porque fue electo por comité de vecinos, estaríamos cometiendo abuso de autoridad”, puntualizó el vocero.
Espinoza explicó que si es reelecto Valdez Batz, es una decisión de los vecinos y el concejo municipal evaluará si interviene.
El alcalde auxiliar dijo que en caso fuera reelecto por el Consejo para un segundo período al frente de la alcaldía auxiliar lo pensaría. Porque su reputación se vio afectada luego de las declaraciones de Monzón.
Neto se limpia las manos
En octubre Bran decidió separar a Valdez Batz de la comuna, para evitar “el desgaste” y con el fin de demostrar “transparencia” a los vecinos, luego de las declaraciones de Monzón.
“El señor Valdez nunca me contó de su relación con Monzón, y por eso tomé la decisión de rescindir su contrato”, explicó Bran.
Se defiende
Héctor Valdez rechazó lo dicho por Monzón en la cárcel, y explicó que lo conoció en el 2005, cuando trabajaba como técnico en la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala.
“No le robé. Lo conocí, pero no concretamos negocios, y jamás creé plazas fantasma. Yo hablé con Nora Segura —ex contralora general—, pero rebajé mis sanciones por la vía administrativa”, manifestó.