Diez personas murieron de frío el domingo en Polonia, donde se registraron temperaturas por debajo de los -20 °C en algunas regiones, anunció este lunes el Centro Gubernamental de Seguridad Nacional (RCB).
Entre viernes y sábado otras diez personas fallecieron en ese país. Según las previsiones meteorológicas, las temperaturas se anuncian más clementes en los próximos días en Polonia, aunque continuarán por debajo del cero de la escala Celsius.
En República Checa, el intenso frío provocó seis muertos desde el viernes, la mayoría gente sin techo, anunciaron este lunes las autoridades. Cuatro murieron en Praga, donde los termómetros marcaron -15 °C, y otros dos, entre los cuales un eslovaco, en Brno y Karvina, en el este del país.
Este clima polar comenzó a atenuarse en Europa occidental, pero este lunes aún hacía frío en Italia donde la prensa anunció dos nuevos decesos por esta causa, un hombre de 82 años fue encontrado muerto en una casa sin calefacción cerca de Brindisi (sur), y otro de 78 años falleció como consecuencia de una caída al sufrir un malestar debido a las bajas temperaturas.
Siete personas, de las cuales cinco sintecho, murieron durante el fin de semana en toda Italia, donde las escuelas de numerosas zonas continuaban cerradas este lunes a causa de la nieve o el hielo en las calzadas, en particular en los Montes Abruzos (centro), y también en Puglia y Calabria (sur), incluso en los alrededores de Palermo.
Frío polar en los Balcanes
En los Balcanes, las temperaturas descendieron hasta -28 °C este fin de semana en Macedonia, donde un sintecho de 68 años fue encontrado muertos en un barrio de la capital, Skopje.
En Serbia, la temperatura más baja se registró el domingo en la ciudad de Sjenica, en el suroeste, con -33 °C, y la navegación en los ríos Danubio y Sava fue interrumpida.
Por otra parte, en la capital Belgrado decenas de migrantes bloqueados por el cierre de la ruta de los Balcanes se refugiaron en un depósito abandonado cerca de la estación de trenes, a causa de temperaturas que rondaron los -15 ºC en la madrugada de este lunes.
“Es muy duro, sobre todo de noche”, afirmó Niamat Jan, un adolescente afgano de 13 años. “Espero desde hace tres meses y no sé cuándo podré continuar mi viaje”, añadió.
Estos migrantes rechazan alojarse en los centros de acogida oficiales por temor a ser devueltos a los países desde los cuales entraron en Serbia (Bulgaria o Macedonia).
“Nadie nos ayuda, hace mucho frío y me preguntos cómo soportaremos esta situación”, lanzó Ismail Jikimi, otro afgano de 16 años.
En Grecia, centenares de refugiados y migrantes bloqueados en las islas del Egeo sufrieron el intenso frío al disponer sólo de tiendas para protegerse de la nieve.
En el campo de Moria, “más de 2.500 personas viven en tiendas, sin agua caliente ni calefacción, incluidos niños, mujeres y personas minusválidas”, afirmó Apostolos Veizis, un responsable de la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), a la radio Vima.
En Bielorrusia, dos personas murieron de frío el domingo. Los termómetros, tras caer hasta -30 °C durante el fin de semana, remontaron hasta -15 °C este lunes.
La temperatura era de -25 ºC en Moscú, donde más de 500 corajudos ciclistas recorrieron un circuito de 15 km el domingo, en que hubo -27 ºC.
En Turquía, un espeso manto de nieve cubría este lunes Estambul por tercer día consecutivo, provocando la anulación de centenares de vuelos, bloqueando en tierra a miles de pasajeros.
La compañía aérea Turkish Airlines tuvo que anular en la jornada 277 vuelos desde los dos aeropuertos estambulitas, después de haber hecho lo propio con otros 600 durante el fin de semana.
El tráfico en el Bósforo, uno de los estrechos más transitados del mundo, fue interrumpido este lunes por los servicios guardacostas, a pesar de haber sido reanudado el domingo, a causa de la mala visibilidad.