Su fama de magnate y su fortuna le permitieron abrirse camino en el cine, la televisión y en los certámenes de belleza, lo cual ayudó a que los estadounidenses se familiarizaran con su nombre, su rostro y su controversial personalidad.
En 1986, la Corporación Miss Universo pasó por una crisis económica que la llevó al borde de la quiebra. Entonces, Trump salió a su rescate cuando compró parte de las acciones y esto permitió la continuación de los certámenes de Miss Universo, Miss Estados Unidos y Miss Teen Estados Unidos.
Como era de esperarse, el magnate ejerció su influencia para elegir a las semifinalistas del evento.
Veinte reinas de belleza fueron coronadas mientras él tuvo el control. El año pasado vendió la organización, solo tres días después de haber comprado todas las acciones.
Durante esos años, Trump siempre estuvo rodeado de mujeres hermosas, pero también de rumores que lo señalaban de aprovecharse de su papel de dueño del certamen.
Polémica
En el 2005, en una entrevista de radio a Howard Stern, se jactó de pasearse entre las concursantes mientras ellas se vestían.
“Lo más gracioso es que antes del show, puedo ir tras bastidores cuando todas se están vistiendo. Ningún hombre puede estar ahí, pero yo sí porque soy el dueño del reinado y puedo supervisar”, dijo el magnate. “Inspecciono porque quiero estar seguro de que todo está bien”, agregó.
Sus palabras no causaron gran efecto hasta el año pasado. Durante la campaña electoral para la presidencia de Estados Unidos, salió nuevamente a la luz el escándalo con la venezolana Alicia Machado, Miss Universo 2006.
Ese año, Trump la criticó por su aumento de peso y la obligó a subirse en una máquina de hacer ejercicios frente a decenas de camarógrafos en Nueva York.
El magnate la acompañó, la tomó de la mano y besó su mejilla; lejos de lucir como algo humillante la escena se vio, al menos en un primer momento, como algo curioso y hasta paternal.
Años más tarde, Machado dijo en una entrevista que aquel episodio marcó su vida y que el millonario la había maltratado verbalmente.
“Miss Señora de la Limpieza” o “Miss Cerdita”, fue la manera como Trump la llamó, recordó Machado.
La escena fue utilizada por la demócrata Hillary Clinton para desprestigiar a Trump en su carrera hacia la Casa Blanca, pero también reveló otras acusaciones contra el magnate.
Mariah Billado, representante del estado de Vermont en Miss Teen 1997, señaló al millonario de invadir la privacidad de las concursantes. Tasha Dixon, candidata a Miss USA 2001 por Arizona lo acusó de irrumpir en los vestidores sin anunciar.
La exreina australiana Jodie Seal aseguró que también sufrió maltratos por parte del magnate.
Coqueteo con la gran pantalla
El ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también se dejó seducir por el cine y mostró su faceta de actor en varias películas, mucha de sus apariciones s fueron cameos (se personificó).
La primera aparición del empresario multimillonario fue en la cinta Ghosts can’t do it, en 1989, a junto a Bo Derek. Por esa actuación recibió el premio Razzie al peor actor de reparto.
Uno de sus más famosos cameos fue en la secuela de Mi pobre angelito: Perdido en Nueva York (1990), el cual mostró a Kevin McCallister, personaje encarnado por Macaulay Culkin, en el lobby del hotel Plaza, que era propiedad del empresario.
También apareció en la película infantil Los pequeños traviesos (1994). Allí interpretó al padre magnate del personaje Waldo, quien estaba enamorado de la pequeña Darla.
Hizo una breve aparición en la comedia romántica Amor a segunda vista (2002), protagonizada por Sandra Bullock y Hugh Grant.
En Eddie, mi nueva coach (1996), protagonizada por Whoopi Goldberg, sobre una entrenadora de básquetbol que logró un repentino éxito al frente de los Knicks de Nueva York, Trump también apareció.
La cinta Zoolander (2001), que tenía como protagonista a Ben Stiller, presentaba un desfile de celebridades entre las cuales, obviamente, estaba Trump.
Aunque no apareció, el personaje de Biff Tannen en Volver al futuro 2 estaba inspirado en el magnate, que hoy toma posesión de la Casa Blanca.
Apariciones en la televisión
El magnate también le apostó a la televisión. Una de sus apariciones más mediáticas fue el reality show El aprendiz, del cual es uno de los productores ejecutivos y por muchos años fue el anfitrión, papel que este año asumió Arnold Schwarzenegger.
Pero no es la única presentación del millonario en la pequeña pantalla. En 1990, junto a su esposa de ese entonces, Marla Maples, hizo un cameo en la serie El príncipe del rap, que era protagonizada por Will Smith. Tump llegó a la mansión de la familia Banks para comprarla.
En la serie Sex and the city, de las décadas de 1990 y 2000, también apareció, en un capítulo, conversando con un colega.
Otro sitcom que no quiso perderse la oportunidad de incluir al magnate en uno de sus episodios fue La niñera (1993-1999).
En el programa de lucha libre Wrestlemania, Trump apareció en escena para golpear a Vince McMahon.