Luego de la entrada en vigor de la Ley de Protección y Bienestar Animal, los felinos fueron retirados de los circos y trasladados a Antigua Exotic, un centro de rescate de vida silvestre que cedió un espacio temporal al Conap y a la Unidad de Bienestar Animal en la Reserva Cun Cun, en La Democracia, Escuintla, donde la organización Animal Defencer International (ADI) se hizo cargo del cuidado de los ejemplares.
Los animales fueron llevados en jaulas de seguridad, pero el tiempo de los trámites para llevarlos a otros países se ha extendido y los felinos empiezan a resentirse por vivir en espacios reducidos, con poca agua y donde la temperatura alcanza los 35 grados.
Danny Mazariegos, director técnico del Centro de Rescate de Antigua Exotic, dijo que interpusieron una denuncia por las condiciones en las que se encontraban los animales, lo cuales pasaban más del 90 por ciento del tiempo en las jaulas, con poca agua y cubiertos por una carpa a temperaturas de entre 31 y 35 grados.
También se denunció a ADI por usurpación de calidad profesional y usurpación a propiedad privada.
“Con anterioridad presentamos algunas quejas de la población del parlesamiento Cun Cun por el mal olor y las moscas por el mal manejo de los desechos de los animales, que son dejados en un agujero a unos 10 metros de las jaulas”, comentó.
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Además, dijo que los animales necesitan más espacio para ejercitarse, pues eso contribuye en que su calidad de vida sea mejor.
Los 15 tigres que permanecían en Antigua Exotic formaron parte de espectáculos circenses. (Foto Prensa Libre: Esbin García)
Gina Morataya, protectora de la reserva Antigua Exotic, detalló que hace año y medio los animales llegaron “gorditos”, pero ahora su aspecto ha cambiado.
“Los tienen en jaulas oxidadas, no los cubren del sol, el pelaje se les ha dañado y no los bañan. Creímos que iba a ser un cambio para bien, pero es como dice el refrán, del fuego cayeron a las brasas”, dijo Morataya.
Postura
Janny Mateus, representante de ADI, dijo que los animales no estaban confinados en las jaulas, ya que salían a un patio de juegos habilitado para ellos; sin embargo, una médica veterinaria de la misma organización señaló que solo salían tres veces por semana y el resto del tiempo permanecían en las jaulas “por estar en cuarentena y por reglamentos internacionales”.
Mateus indicó que el traslado de los felinos se da porque el lugar no es el óptimo para ellos, porque la temperatura es extrema.
“Este es un lugar temporal donde se realizan todos los trámites para que los animales sean exportados a santuarios internacionales”, refirió.
Rony Espino, coordinador de la Unidad de Bienestar Animal, señaló que el tiempo que los felinos han pasado en ese lugar se debe a los procesos que debieron cumplir.
“Se tenía que cumplir con los permisos de importación y exportación, y una de las razones de que movemos a los animales es porque estamos en la etapa final. En septiembre u octubre ya tres salen del país a un santuario en Estados Unidos y otros a Sudáfrica”, comentó.
Los felinos fueron llevados a una propiedad privada, ubicada en carretera a El Salvador. (Foto Prensa Libre: Esbin García)
Los 21 animales fueron trasladados a un terreno privado, ubicado en la carretera a El Salvador por estar “cerca del aeropuerto”, dijo Espino, quien agregó que en ocho días permitirán una visita de seguimiento al lugar.
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