El Comité de Competición, órgano disciplinario de la RFEF, desestimó las alegaciones del Barcelona sobre la segunda tarjeta amarilla que recibió el uruguayo por lo que mantuvo el partido de suspensión que acarrea la expulsión por doble amonestación.
Respecto al segundo encuentro de suspensión, el Comité refleja en su decisión el acta del árbitro del encuentro, que especificaba que Luis Suárez no se retiró del todo del terreno tras su exclusión.
El árbitro escribió que el jugador “retrasó su salida del terreno de juego de manera considerable, haciendo caso omiso a mis instrucciones” y después “permaneció en las escaleras de acceso al túnel de vestuarios observando el partido hasta que éste finalizó, a pesar de que el cuarto árbitro comunicó en reiteradas ocasiones de que debía marcharse a los vestuarios” .
Según el código disciplinario de la RFEF, “quienes sean expulsados deberán dirigirse a los vestuarios sin posibilidad de presenciar el partido desde la grada. El incumplimiento de la citada obligación será objeto de sanción entre uno y tres partidos de suspensión” .
Tras esta sanción, Luis Suárez autor del gol de su equipo el martes, se perderá la final de la Copa del Rey y el primer partido copero de la próxima temporada.
El comité también sancionó con un partido de suspensión a su compañero de equipo Sergi Roberto, expulsado en el mismo partido por doble amonestación y que también se perderá la final, así como al jugador del Atlético de Madrid Yannick Carrasco, que también vio una doble amarilla.