El primer borrador del proyecto de ley, al que Prensa Libre tuvo acceso, plantea la creación del voto nominal preferente. Es decir, los partidos propondrán una lista de candidatos a diputados tal como ocurre ahora, pero también se colocarán fotografías. Los electores tendrán la opción de votar por la sugerencia de las agrupaciones políticas sin cambios o bien elegir a los candidatos que mejor les parezca en la nómina.
El postulante que obtenga más votos será el electo como congresista.
Para evaluar la votación nominal, los diputados Argueta y Mario Taracena viajaron esta semana a El Salvador, donde se reunieron con sus colegas de ese país y con autoridades electorales para conocer la experiencia que tuvieron durante las últimas elecciones, cuando incluyeron por primera vez esa modalidad.
Otra de las propuestas en la reforma es la creación de subdistritos electorales. Los departamentos serán divididos en zonas electorales que se definirán según el número de habitantes, la ubicación geográfica y su posición sociocultural.
Cada subdistrito podrá elegir uno o más diputados de acuerdo con el número de habitantes.
En el primer borrador se propone la creación de 28 subdistritos para elegir a los 160 diputados.
Pese a la elección nominal y subdistrital, la propuesta mantiene la elección de diputados por lista nacional, que ha sido criticada debido a que esos congresistas no tienen representación electoral concreta.
Nuevas modalidades
La propuesta que se discute en la Comisión de Asuntos Electorales le da la oportunidad a los comités cívicos de postular no solo candidatos para alcaldes y para las corporaciones municipales, sino que ahora se les abre la posibilidad de proponer diputados distritales, según sea su naturaleza.
La consulta popular también es reglamentada en la propuesta. Para ello se reconoce el sistema de minoría relativa, que se utilizará en la elección de alcaldes y síndicos.
De acuerdo con el documento, para que un candidato a una corporación municipal se declare ganador, deberá superar el 25 por ciento de los votos válidos emitidos. Además, deberá haber contado con cinco por ciento más de votos que la segunda planilla más votada.
Si se incumple con esos requisitos, se crea la modalidad de la segunda vuelta, en la que competirán las dos planillas que hayan obtenido la mayor cantidad de sufragios. Esa nueva elección se efectuará el mismo día que se haga el balotaje de los comicios para presidente y vicepresidente.
La propuesta también plantea la creación de más juntas receptoras de votos. En la actualidad se exige que las mesas de votación se coloquen en las comunidades que tengan por lo menos 500 empadronados. La intención es reducir a 250 ese requisito.
Según Argueta, la intención es llegar a un mayor porcentaje de la población, ya que muchos ciudadanos se abstienen de votar debido a que carecen de los medios para movilizarse.
Quedan fuera
La paridad de sexo y de etnias en la postulación de candidatos continuará siendo un sueño para muchos, ya que la propuesta no recoge esa idea, una exigencia de grupos de la sociedad civil.
Según varios diputados, se pidió que ello se incluyera en esta nueva iniciativa, llamada segunda generación de reformas electorales. Sin embargo, no se contó con el apoyo dentro de la comisión.
Plazos
La idea es que la nueva propuesta pueda ser analizada durante la Semana Santa por los integrantes de la mencionada comisión, quienes podrán hacer modificaciones, con el fin de que se tenga una iniciativa final que se dictaminará y presentará a la Dirección Legislativa en mayo próximo.
Ese plazo se plasmó con la intención de que pueda iniciarse la discusión en el pleno después de la aprobación de las reformas a la Constitución para el sector justicia.
Los diputados aún no han definido qué cambios podrían tomarse en cuenta para las elecciones del 2019, pues la mayoría se plantearía para el 2023.
Cambios necesarios
Para el procurador de los Derechos Humanos, Jorge de León Duque, reformar el sistema de elección es necesario para lograr un cambio verdadero.
Según el ombudsman, las personas están decepcionadas de las instituciones públicas porque el sistema está fallando. “No es posible tener un presupuesto de miles de millones de quetzales que no garanticen la vida de los niños”, lamentó.
Para De León Duque cambiar el sistema político es fundamental. Se le debe dar más representación a los poderes locales. “El sistema político no ha dado resultados. La gente se está muriendo de hambre, nuestra democracia está quedando a deber”, estimó.
Iniciativas
Esta no ha sido la única propuesta que ha surgido para reformar el sistema de partidos políticos. En septiembre del año pasado el Ejecutivo presentó una iniciativa, la cual fue enviada a la Comisión de Asuntos Electorales.
De acuerdo con algunos diputados, esta propuesta no fue recogida en el análisis de los cambios que se están elaborando. “Se colocará en el proyecto de ley que se tuvieron a la vista, pero en verdad quedarán como un pie de página”, refirió un congresista que solicitó el anonimato.
La propuesta del Ejecutivo recogía criterios como la paridad y alternancia de hombres y mujeres en la postulación de candidaturas a cargos de elección popular, así como la creación de partidos políticos distritales y más requisitos para las organizaciones políticas.