Con una vuelta de 1 minuto, 31.678 segundos, el piloto británico de Mercedes batió por más de medio segundo la marca fijada hace 13 años por Michael Schumacher, y superó por menos de dos décimas de segundo a su rival de Ferrari, Sebastian Vettel.
Hamilton, cuatro veces campeón en Shangai, también logró la vuelta más rápida en la historia del GP de Australia en la clasificación de esa carrera el mes pasado.
De todas formas, Hamilton no cree que sea el favorito para la carrera del domingo, tomando en cuenta la velocidad exhibida por los bólidos de Ferrari.
“Los Ferraris lucen muy rápidos”, comentó. “Es súper emocionante para mí, porque estamos en una batalla con ellos, y eso nos obliga a elevar el nivel cada vez que salimos a la pista”.
Hamilton también largó desde la pole en el GP de Australia, pero Vettel lo superó en la carrera, cuando el británico acudió a los pits temprano y después no pudo adelantar posiciones entre el tráfico.
Esa fue la primera victoria de Vettel en más de un año, y dejó claro que la escudería italiana es capaz de retar el monopolio de Mercedes de los últimos años.
“Obviamente es divertido cuando puedes disputar las poles y los triunfos”, dijo el alemán. “En realidad no teníamos grandes expectativas (en Shangai) porque es una pista completamente distinta, pero por otro lado sabemos que nuestro vehículo está funcionando bien, así que sólo necesitamos seguir así”.
El compañero de Hamilton, Valtteri Bottas, largará tercero, mientras que Kimi Raikkonen se hizo con la cuarta plaza de la parrilla en su Ferrari.