González explicó que mensualmente necesitan al menos Q12 mil para las consultas periódicas con especialistas y adquirir el medicamento que le ayuda a eliminar el hierro tóxico en la sangre, la cual es mortal y que debe tomar mientras se siga haciendo transfusiones.
“Es urgente que Adrián se someta a una esplenectomía (extirpar el bazo) para poder evitar que su hígado se siga dañando y llegue a causar cirrosis, la cual sería irreversible”, expresó el angustiado padre.
Manifestó que han tocado puertas en varios hospitales públicos del país pero lamentablemente no le han dado la atención que necesita por falta de conocimiento a la enfermedad. Afirman además, que han solicitado apoyo de varias instituciones de gobierno, pero a la fecha no han recibido respuestas concretas.
“Hemos visitado un sinfín de médicos para tratar de encontrar que es lo que padece nuestro pequeño, pero ninguno nos ha dado un diagnóstico. Es triste ver a nuestro hijo con tantos sueños e ilusiones y no poder contar con los medios para garantizarle una calidad de vida”, comentó.
Ejemplo
“Adrián es un ejemplo para nuestra familia y para los otros niños, él nos ha enseñado a nosotros a cómo vivir con esta situación. Nos ha enseñado que no hay que dejarnos vencer y luchar uno por sus sueños y en este caso su sueño es vivir”, expresó González.
Para familiares y amigos Adrián, el menor de cuatro hermanos, es un guerrero que no se da por vencido, pues lucha día a día esperando que Dios le brinde un milagro y le permita ser un niño normal.
Prensa Libre ha publicado su historia en varias oportunidades y el apoyo ha crecido, pero no ha sido suficiente, por lo que ahora busca otra mano que le ayude a continuar con su ilusión de vivir. Si desea apoyarlo puede comunicarse al teléfono 55290730 o por medio de la página de Facebook “Ayuda para Adrián”.
Su sueño
Adrián sueña con ser un futbolista profesional y aunque ahora le gusta más jugar en la posición de portero, su ejemplo a seguir al igual que sus hermanos es el astro argentino del Barcelona Lionel Messi; el conocerle sería su máxima aspiración y aunque parezca algo imposible mientras existan las posibilidades el mantiene la ilusión de poder saludarlo.
El pequeño es un niño con mucho ángel, disfruta de jugar con sus hermanos y amigos. Además le gusta hacer nuevos amigos, su sencillez y carisma le hace ganarse el cariño de todas las personas muy fácilmente.
NOTA DE REDACCIÓN: Se actualiza nota publicada el 3 de mayo de 2017.