J.Lo, como se le conoce a la artista, subió al escenario ataviada con un body blanco, una camisa a cuadros y una gorra rosa. Al compás de la música se unió a sus bailarines para demostrar que a sus 47 años nadie le gana en el baile.
Transcurridos unos segundos, la cantante se colocó de espaldas al público para presentar el momento más picante de la noche: un explosivo twerking que hizó mientras se levantaba la camisa y movía sus caderas al ritmo de la canción para sorpresa y deleite de sus admiradores.
Las imágenes fueron grabadas en video y publicadas en la cuenta oficial de Instagram de la artista, que en 72 horas han sido reproducidas más de 7.2 millones de veces, y la cifra va en aumento.
López es una destacada bailarina que pone especial detalle en cada una de las coreografías que realiza sobre el escenario.