“Nada nos da mayor garantía que un empleado feliz, y esta afirmación motiva a que los ejecutivos armen negocios. Si se es feliz, la empresa es más productiva”, explicó Cala.
El discurso es parte del Método Cala, que ofreció a empresarios y ejecutivos de varias empresas.
“En la actualidad se ha comprobado que hay empresas de gran valor a nivel mundial y que están relacionadas con empleados felices y motivados”, enfatizó.
El conferencista explicó que es posible ser feliz mientras se trabaja, independientemente de la cultura, mitos o prejuicios que se hereden desde pequeños.
“Las empresas han cambiado en poco tiempo: Uber es la compañía más grande de taxis y ni siquiera cuenta con inventario físico de autos; Facebook muestra millones de contenidos que son generados por sus propios usuarios”, ejemplificó.
Método Cala
Este sistema tiene como objetivo motivar a los líderes de gestión humana de las principales empresas y comunidades para estar informados sobre las últimas tendencias en formación y desarrollo de talento.
Según Cala, las prácticas corporativas de felicidad que estimulan la productividad y la innovación ya se implementan con éxito en Europa y EE. UU.
El Método también se enfoca en el sector de la Educación, tanto a estudiantes como docentes, objetivo que lo trajo al país y bajo el cual firmó una alianza entre Tigo y su fundación, y con la que se han instalado 300 escuelas.
“Organizaciones civiles y gubernamentales reconocen que la educación es la mejor manera de estabilizar una comunidad, empoderando a las personas y creando líderes efectivos”, explicó el motivador.
“Sabemos que los adolescentes vulnerables son presa fácil para la violencia, el abuso de drogas y la delincuencia. Por eso vemos la necesidad de formar a los jóvenes líderes cuando aún están en la escuela”, dijo.
El Método Cala es un programa modelo que entrena, equipa y empodera a los docentes para que transmitan habilidades de liderazgo y estrategias de éxito a sus estudiantes.
El objetivo de este programa es implementarlo en cinco países para finales del 2018.
En el 2012, Fundación Tigo puso en marcha el programa Escuelas ABC, que consiste en la construcción o remozamiento de aulas, baños y cocinas, para la creación de espacios físicos limpios, higiénicos y estructuralmente adecuados, con entornos psicosociales sanos y seguros.
Un año después, la Fundación agregó el componente digital al programa, consistente en centros de cómputo con equipo tecnológico y software educativo.
Es así como surgió el Programa Escuelas ABC/Digital, que logró llegar a 300 edificios construidos y reconstruidos, más de mil 500 computadoras entregadas y 84 mil 200 niños y niñas beneficiados.
