New Line Cinema, la unidad de Time Warner encargada de llevar al cine las novelas, fue la responsable de lidiar con la demanda de la familia contra la empresa.
A través de un documento judicial divulgado se ha conocido que ambas partes han llegado a una resolución. “Las partes están satisfechas de haber resuelto este asunto de forma amistosa y esperan ansiosas trabajar juntas en el futuro”, dijo el vocero de Warner, Paul McGuire.
La demanda se basaba en la violación a un acuerdo de 1969 que permitía a la empresa vender mercancía tangible basada en los libros y películas, pero esto no incluía los productos digitales.
Según el portal Hipertextual, la demanda se llevó a cabo luego de que el abogado de la familia Tolkien recibiera un correo spam con publicidad para el juego Lord of the Rings: The Fellowship of the Ring: Online Slot Game.
Warner alegaba que estas explotaciones digitales eran habituales y legales dentro del contrato. No se reveló al público los términos en que se cerró la demanda.