A partir de que salieron a luz los casos de corrupción en el 2015, la participación ciudadana ha propiciado más denuncias. En enero de este año se presentaron 150; la mayoría por la Contraloría, asegura Stuardo Campo, fiscal contra la corrupción.
“Cada año se incrementan las denuncias de corrupción. Gran cantidad de las que ingresan están relacionadas con las municipalidades; entre estas la de Taxisco, Santa Rosa; Los Amates, Izabal; Ciudad de Guatemala, Zacapa, Mixco, Quetzaltenango y uno de los últimos casos es el de San Marcos”, señaló Campos.
El fiscal añadió que la “no ejecución” de proyectos, obras sin terminar, contrataciones dudosas, son algunos de los señalamientos contra las comunas que se observan en los expedientes.
“Para darle una idea de cómo han crecido las denuncias, en el 2014 se presentaron 200; un año después, 800, y en el 2016, mil 200, mientras que en los primeros meses del 2017 –sin especificar cuáles- ya se registraron 700”, añadió.
El presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), Edwin Escobar, aseguró que trabajan en capacitar a los mandos medios y a la misma corporación municipal, para que sean mejores gestores del gasto público.
“Se habla de muchas municipalidades cuando hay un solo gobierno. La cantidad no obedece a que sean malas, sino que hay 340 comunas. Se vive una coyuntura particular que, en aras de que se está cumpliendo en su rol de fiscalización, hay un intento de estar presentando hallazgos y denuncias como no se había dado antes, muchos sin fundamentos”, refirió Escobar.
¿Y la Contraloría?
En cuanto a las denuncias que interpone la CGC, algunos procesos de investigación se atrasan porque no van acompañados de las auditorías, las cuales deben ir revisadas por el supervisor, por lo que se hace necesario solicitar una especial, que toma más tiempo.
Carlos Mencos, contralor general de Cuentas, afirmó que los auditores presentan las denuncias cuando sospechan de un delito, sin haber finalizado las auditorías.
“Los auditores, en muchos casos, encuentran la posible comisión de un delito y presentan la denuncia, y por lo acelerado que pueden ser las investigaciones puede que los rebase el tiempo que tienen para concluir los informes”, explicó Mencos.
El lineamiento que se debe seguir ahora es que desde el momento en que se presenta la denuncia vaya incluido el informe de auditoría, ya que dará al investigador insumos para desarrollar mejor su trabajo.
Mencos explicó, sin proporcionar mayores datos, que algunas de las denuncias presentadas han sido desestimadas por ese motivo. El reto ahora es que los auditores respeten la opinión del área jurídica, y si no hay indicios para sustentar una denuncia, que presenten otro tipo de acción correctiva.
Problema de muchos años
El presidente de Acción Ciudadana, Manfredo Marroquín, manifestó que este “pimponeo” entre el MP y la Contraloría lleva muchos años.
Ha sido un juego de pimpón, donde se inculpan ambos entes, ante la falta de avance de las investigaciones. El concepto de que el Estado es una unidad no cala en las instituciones públicas.
Marroquín considera que lo que debería haber es un trabajo conjunto entre ambas instituciones.
“Parte del esfuerzo que hemos querido hacer en la Alianza por la Transparencia es ese. Crear un espíritu de unidad en el Estado de Guatemala, y por qué tiene que trabajar en conjunto. Pero en este dilema es un desafío por construir”, explicó.
Marroquín agregó que poco sirve que haya más denuncias si no tienen fundamento, que es bueno que crezca la denuncia con evidencias; de lo contrario, afirmó, “es como inflar un globo; solo aire”.