La embarcación, con capacidad para 162 pasajeros, se hundió en un sitio próximo a la isla atlántica de Itaparica y los equipos de socorro han rescatado con vida a 34 personas, aunque las informaciones eran muy fragmentadas pues varios botes, incluso de pescadores, ayudaron en las tareas de salvamento.
La Marina envió tres navíos de la Base Naval de Aratú y tres lanchas de la Capitanía de Puertos para auxiliar en las búsquedas.
Hasta el momento no hay informaciones precisas sobre las causas del accidente, pero los bomberos indicaron que la marea era fuerte a la hora del accidente, así como los vientos, y que las olas llegaban a dos metros de altura.
Este naufragio ocurrió un día después de que se fuera a pique una embarcación de pasajeros en el río amazónico Xingú, en un suceso que, según un último balance difundido este viernes, dejó al menos 19 muertos y unos siete desaparecidos.
El barco transportaba a 49 pasajeros pero una veintena consiguió nadar hasta las orillas del río Xingú.