El simulador de conducción saca partido a la capacidad visual de la nueva Xbox One X con una tasa de 60 frames por segundo, alcanzando un nivel de realismo nunca antes visto.
Los juegos utilizados para la versión anterior de Xbox podrán utilizarse sin problemas en la nueva consola pero con una serie de mejoras, entre las que destaca la calidad de la resolución en pantalla.
- Podría interesarle: Nintendo y la nostalgia regresan con la SNES Classic
En total, hay más de 1.000 juegos exclusivos y más de 100 títulos se han adaptado a las características de la nueva plataforma.
Entre las novedades está la aventura de Assassin's Creed Origins, que estará en las tiendas a partir de este otoño para transportar a los jugadores a una aventura en el antiguo Egipto.
También figura la última edición del clásico Age of Empires que saldrá a la venta el 19 de octubre, Halo Wars 2, en tiendas desde el 26 de septiembre, y multitud de juegos adaptados para consolas anteriores o para el ordenador, como Tomb Rider y Gears of War 4.
El anuncio de la Xbox X, el pasado mes de junio en la vigésimo tercera edición Electronic Entertainment Expo -más conocida como E3-, ya había adelantado la capacidad de realidad virtual con un alto rendimiento pero sin formar parte de una nueva generación de consolas.
La nueva máquina brinda la oportunidad de jugar con mejor calidad en la iluminación gracias al uso de HDR, apreciar texturas más detalladas en la pantalla y manteniendo una excelente calidad de sonido.
- Podría interesarle: Pokémon GO aún se mantiene con vida
La compañía espera que la potencia gráfica, lo que más se resaltó de la nueva consola durante el evento, es que estimule a crear nuevos juegos más ambiciosos capaces de atraer cada vez a más usuarios.
Las prestaciones de Xbox y su diseño convierten a la consola en una de las más atractivas del mercado, según González, sobre todo para aquellos jugadores “más elitistas” que buscan la mayor resolución y realismo en la pantalla.
En 2013 Microsoft lanzó al mercado el modelo original de Xbox One y tres años más tarde le siguió su actualización bajo el nombre Xbox One S, con mejoras en la CPU y soporte HDR.
La Xbox One X es el doble de cara que sus predecesoras pero posee unas capacidades nunca antes vistas en otras consolas, por lo que se espera que sea un éxito de ventas para hacer frente a su principal competidora, la PlayStation 4 Pro de Sony.