Más detalles del caso
Tiene una larga carrera como consultor político, principalmente ayudando a mejorar la imagen electoral de funcionarios de alto perfil. Entre su lista de clientes se pude destacar a los expresidentes Ramiro de León Carpio y Álvaro Arzú Irigoyen.
También resalta su trabajó como consultor del Canciller de Guatemala en 1993 para presentar el relanzamiento del plan de negociaciones de paz en Guatemala ante la Organización de las Naciones Unidas y ante la prensa norteamericana.
Se unió al proyecto político del Partido Patriota (PP) y cuando el expresidente Otto Pérez Molina finalmente alcanzó el poder en 2012, fue nombrado embajador de Guatemala en Washington DC, el consulado más importante que tiene el país en Estados Unidos. Dejó el cargo en 2015.
Sin embargo, el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad (CICIG) tienen razones para señalar que el trabajo de Ligorría dentro gobierno del PP fue más allá que el diplomático. El embajador presuntamente habría gestionado aportes ilícitos a la campaña del partido valiéndose de sus contactos.
El intimo consejero
La misma experiencia que llevó a Ligorría a ser el invitado especial del expresentador de CNN, Ismael Cala, en su programa para analizar las elecciones de Perú en 2011, fue la que sedujo al PP para reclutarlo dentro de sus filas.
Dentro del partido continuó haciendo lo que mejor sabía: asesorar. Por su capacidad de gestionar imagen política se convirtió en uno de los consejeros más cercanos a cúpula del partido patriota, encabezada por Pérez Molina y la exvicepresidenta, Roxana Baldetti.
La investigación
El 14 de julio último, el jefe de la Cicig, Iván Velásquez, afirmó que allanamientos efectuados meses atrás en diversas empresas vinculadas al exministro Sinibaldi permitieron obtener información relacionada al ingreso de recursos a empresas para financiar la campaña electoral del PP. Estos habrían sido gestionados por Ligorría.
El comisionado detalló que, luego de los hallazgos, se entrevistó al entonces gerente de Telgua, Julio Carlos Porras Zadik, quien en prueba anticipada aceptó que la empresa hizo pagos al PP a través de 12 cheques y 20 facturas a 6 empresas.
Según Velásquez, Porras Zadik dijo en su declaración que los recursos fueron entregados como parte de una estrategia político comercial, diseñada por el exembajador Ligorría para resolver el litigio entre Telgua y Tigo.
