La alcaldesa Ada Colau, que se opone a la independencia sin un referendo válido con garantías fundamentales, calificó la medida de “ataque grave” a la autonomía catalana.
Políticos del partido separatista de izquierda ERC calificaron la medida de “golpe de Estado” para aplastar la autonomía catalana. El vicepresidente de la región, Oriol Junqueras, instó a la población a participar de una marcha de protesta en Barcelona.
“Aplicamos el artículo 155, porque ningún gobierno, ningún gobierno, de ningún país democrático puede aceptar que se ignore la ley, que se viole la ley, que se cambie la ley”.
Organizaciones de base en Cataluña que han sido el motor de la campaña de independencia llamaron las medidas “autoritarias” y llamaron a una proclamación inmediata de una república catalana.
El jefe del gobierno catalán Carles Puigdemont ha amenazado con convocar a una votación en el parlamento regional ara una declaración explícita de la independencia de España.
Rajoy dijo que aplicará el artículo 155 de la Constitución para “restaurar la normalidad” en el país, que enfrenta su crisis institucional más grave en décadas. Dijo que debería realizarse una nueva elección en Cataluña en los próximos seis meses.
Dijo que invocará el Artículo 155 de la Constitución para “restaurar la normalidad” en el país, que enfrenta su crisis institucional más grave en varias décadas. Añadió que se convocará a elecciones en la región lo antes posible.
El Partido Popular de Rajoy tiene mayoría en el Senado y cuenta con el apoyo de algunos partidos opositores para aplastar el intento independentista de Cataluña y mantener la integridad territorial de España.
Otros partidos políticos españoles expresaron también su rechazo.
Hablan de golpe de Estado
La presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell, aseguró hoy que los integrantes de esa Cámara no permitirán la puesta en marcha de las medidas aprobadas por el Consejo de ministros español para restablecer la legalidad en esa región, que calificó de “golpe de Estado de facto”.
Forcadell compareció en el Parlamento catalán y dijo que con esas medidas el Ejecutivo español “han traspasado todos los límites” y se mostró convencida de que son inconstitucionales.
A esas disposiciones no les acompañan “ni la legalidad ni la legitimidad política”, según la dirigente independentista, convencida además de que lo aprobado por el Gobierno español no cuenta con el apoyo de una mayoría de los catalanes.
“Los que se llenan la boca hablando de la Constitución caerán en la más flagrante inconstitucionalidad al pretender suspender la democracia en Cataluña”, agregó Forcadell.