El Servicio de Pesca y Fauna Salvaje (USFWS) “emitirá licencias para importar trofeos de elefantes cazados con fines recreativos en Zimbabue desde el 21 de enero de 2016 hasta el 31 de diciembre de 2018”, escribió el jueves en su sitio web la agencia federal de caza y pesca de Estados Unidos.
Así confirmó oficialmente un anuncio que se hizo esta semana durante un foro sudafricano pro caza. Varios medios estadounidenses dicen que la licencia también se aplicará a Zambia.
“Comportamiento reprobable de la administración Trump, 100 elefantes son abatidos ya todos los días. Esto llevará a más caza furtiva”, denunció The Elephant Project en Twitter.
El gobierno del presidente republicano apela con esta decisión a un aspecto de la Ley de Especies en Peligro (Endangered Species Act), que establece que la importación de estos trofeos puede ser legal si se demuestra que la caza beneficia a la conservación más amplia de especies.
“La caza de entretenimiento, legal, bien enmarcada, como parte de un programa, puede beneficiar la conservación de ciertas especies al alentar a las poblaciones locales a conservar las especies e inyectar dinero a la conservación”, explica USFWS.
“Para apoyar la conservación, los cazadores deben optar por cazar solo en países que tienen un gobierno sólido, una regulación inteligente y poblaciones salvajes sanas”, agregó la agencia.
Este razonamiento, denunció el jueves la asociación estadounidense de defensa animal PETA, “equivale a vender un niño en el mercado negro con el fin de recaudar dinero para luchar contra la violencia hacia los niños”.
Otros observadores también se preguntaban si la decisión está vinculada con la pasión de los hijos del presidente, que regularmente van a África a cazar.
Una foto, en particular, estaba siendo este jueves muy compartida en las redes sociales. En ella se ve a Donald Trump Jr posando, con una navaja en su mano derecha y una cola de elefante en su mano izquierda, junto al animal muerto.
