El bono de consulta popular será equivalente a un mes de sueldo, tomando como principio la asignación del salario base, más el complemento salarial y las bonificaciones de antigüedad y profesional, así como los gastos de representación que tengan los trabajadores del TSE en el mes de inicio del proceso consultivo.
Este bono representa para la presidenta del TSE, María Eugenia Mijangos, un primer pago de Q28 mil 375, y para los magistrados titulares, Q25 mil 75. Al finalizar el proceso de consulta recibirán la misma cantidad.
Dos magistrados confirmaron el pago, el primero fue Jorge Mario Valenzuela, quien dijo que no sabía nada del bono, debido a que está convaleciente por una operación que le practicaron, por lo que pensó que era la primera parte del aguinaldo.
Mientras que el magistrado Mario Aguilar Elizardi aseguró que era un bono que todos los magistrados han recibido, por ser parte del pacto colectivo.
En total, el TSE erogará por los cinco magistrados titulares Q257 mil 350. La partida presupuestaria para este pago es de Q10 millones 284 mil 575, que beneficiará a 872 trabajadores del TSE.
María Eugenia Mijangos, presidenta del TSE.
Mijangos indicó que, a pesar de que aprobaron el bono, desconoce si lo recibieron los magistrados.
“Yo cuando asumí de magistrada no sabía cuánto era el salario. Ni me interesó saberlo. Como presidenta, voy a estar trabajando todo el tiempo. No es algo que hayamos establecido para servirnos, sino que era algo que ya estaba establecido. Cuando se dio el incremento salarial de hace pocos meses, a iniciativa mía, nosotros no entramos en ese acuerdo, ni los funcionarios del Tribunal”, explicó Mijangos.
La magistrada dijo que no había revisado si le habían dado el pago.
Hace meses el TSE aprobó un incremento salarial de Q1 mil para todos los empleados del Tribunal.
El bono también lo gozarán quienes estén suspendidos por el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, licencia con goce de salario por accidente, enfermedad o maternidad, cuya prestación la hubiere otorgado el Tribunal por no estar cubierto por los programas sociales.