“Es fundamental entender que los Derechos Humanos se han planteado muchas veces en Guatemala como algo negativo, como un límite u obligación indebida, en realidad no es así. Los Derechos Humanos son el principio fundamental que es innegable”, dijo el embajador de UE.
Lucía Valenzuela, directora de ABHR consideró que la principal conclusión del evento fue lograr que se reunieran a discutir sobre derechos humanos el sector privado, sociedad civil y sector público.
La Jefa de Misión Adjunta para la Embajada Británica Barbara Amono-Oceng, dijo “creemos que el enfoque del Reino Unido es un balance apropiado entre promover un comportamiento serio por parte del sector privado en empresas y derechos humanos y evitar un enfoque sobre regulado”.
“El tema (de empresa y derechos humanos) como no se conoce da mucho miedo, pero creo que los derechos humanos es algo que tenemos que respetar y son temas que tenemos que trabajar” dijo Connie de Paiz, presidenta de Agexport.
Además mencionó que “es un tema que Guatemala lo tiene que trabajar a todos los niveles, pero lo más importante es que necesitamos un Estado y Gobierno fuerte para que nos den el marco legal sobre el cual vamos a trabajar, y que todo mundo entremos en ese marco legal, pero que sea claro para que no hayan después malentendidos ni cosas que no se puedan cumplir”.
Agregó que se está empezando a trabajar en Guatemala y que es importante hacerlo voluntariamente por lo que con las Cámaras empresariales se están creando políticas sobre ese tema para poder ayudar a las empresas a trabajarlo.
Valenzuela dijo que otra de las conclusiones es que las empresas no deben ver el tema de derechos humanos como contrario a sus intereses económicos sino como una herramienta que les ayude a funcionar mejor, por ejemplo a llevar mejores relaciones con sus comunidades, con el Estado, con los trabajadores.
El miedo se va quitando con conocimiento, hay que formarse y tener expertos en la materia porque no se puede implementar aquello que no se conoce, añadió Valenzuela.
“No hay choque entre derechos humanos y empresas”
Los Derechos Humanos se deben ver desde la faceta positiva, no solo pueden quedarse en la faceta negativa en decir que son más reglas que cumplir, sino que son una respuesta a algo fundamental que se vuelve un factor ganador para la empresa, dijo el Embajador de la UE.
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“Las empresas funcionan mejor donde haya reglas claras, pero también donde haya una ciudadanía con buena salud, mejor educada, bien nutrida. Eso redunda en beneficio de la prosperidad económica” añadió al comentar que en Europa se hizo a través de políticas sociales que han sido exitosas y que han mejorado su estilo de vida” añadió y sostuvo que “no hay choque entre derechos humanos y empresas”.
Para poder dialogar y avanzar es necesario, en cualquier contexto y sociedad, la voluntad de sentarse en una mesa y voluntad de conseguir resultados de buena fe, agregó Gatto al referirse a la necesidad de mantener un diálogo pero dinámico y que avance.
“Creo que muchas partes del sector empresarial están demostrando que quieren avanzar con el país, y hacer avanzar el país, y eso es lo que están haciendo porque sin iniciativa privada ningún país avanza. Pero al mismo tiempo hay una serie de temas que se tienen que tomar en cuenta porque una empresa no es algo aislado de la realidad sino que es parte del país” y de esa realidad, comentó.
“Una persona no puede decir de entrada: los derechos humanos para mi no existen, porque debe tener presente que existe el derecho a la vida, derecho al aire puro, derecho al agua. Ahí lo que se tendrá que ver es cómo reglamentar y desarrollar esos derechos”, complementó el diplomático.
169 de OIT, punto pendiente para Guatemala
Lograr la correcta aplicación del convenio 169 de la OIT acerca de las consultas a las comunidades en un reto pendiente para el país, dijo Gatto.
Considera que se deben distinguir dos casos diferentes: uno son las futuras inversiones donde se debe llevar a cabo la consulta de la medida más amplia posible y recabar opinión de las comunidades y ofrecer un paquete de ventajas, a veces se ofrecen pero no se dan a conocer bien, añadió.
Pero, considera que los casos se han entrampado en Guatemala porque se ha intentado aplicar ese convenio en inversiones ya existentes y que ya operan.
“Ahí se complica porque no es muy conveniente decir: empresa usted ahora debe parar todos los motores durante dos, tres o cuatro años, el tiempo que lleve la consulta, porque eso en el mundo de la economía es inviable, la empresa va a quebrar. Entonces lo que se debe encontrar es una fórmula adecuada para resolver los casos de las empresas que en su día emprendieron una actividad sin cumplir con el 169 de la forma que se se entiende como consulta explícita y por otro lado que se aplique el 169 en su generalidad a las nuevas inversiones. Pero bloquearlo mientras se hace la consulta no es operativo” expuso en declaraciones a los medios el Embajador de la UE.
“Tampoco puedes decir: no haremos nada sino lo que debe hacer la empresa es entablar con dialogo con la población para entablar una serie de medidas de responsabilidad social empresarial que sean satisfactorias” dijo Gatto.
Por ejemplo citó que no tiene sentido instalar un proyecto de generación de electricidad en una comunidad a la cual le hace falta ese servicio y no dotarla de este, por eso hay que encontrar la forma de llevarle servicio y no solo decir que la ley no lo permite, sino que se deben buscar opciones, expuso.
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