Quevedo dijo que un objetivo de su labor es revisar las cuentas y las operaciones y aplicar correctivos.
“PDVSA atraviesa una crisis financiera muy importante y mi designación apunta a contribuir a sacarla adelante en una coyuntura muy difícil. (Para eso) tenemos dos grandes ejes transversales: por un lado, la producción como una estrategia fundamental, pero por otro lado, afianzar lo que son los mecanismos financieros para hacerla rentable”, explicó.
Señaló que el aumento de los costos de producción se debió a “decisiones” que se tomaron en la anterior gestión. “Hay que evaluar y eso forma parte de esta restructuración que estamos haciendo”, aseveró.
“Primero, los elevados costos de una deuda elevada para el patrimonio de PDVSA, que en los actuales momentos nos golpea los ingresos”, añadió.
PDVSA fue sometida a una reestructuración que elevó su personal a más de 150 mil trabajadores, después de tener unos 22 mil hasta el 2002, cuando el fallecido presidente Hugo Chávez despidió a unos 18 mil por haberse sumado a una huelga general.
La producción de PDVSA viene en declive en los últimos años y Quevedo admitió que está cerca de 1.9 millones de barriles diarios. Quevedo dijo que su meta es llevar el bombeo este año a más de dos millones de barriles.
Incentivar la exportación
Sostuvo que su política durante este año se centrará, además de en el incremento de la producción, en la lucha contra la corrupción, el fortalecimiento del sistema de refinación nacional, la industria petroquímica y el mercado interno, así como en Incentivar la exportación.
El Mayor General apuntó que el 49 % de las exportaciones petroleras salen hacia Asia, el 31 % hacia Norteamérica, el 10 % hacia los países caribeños, un 5 % hacia Europa y 5 % hacia ” otros mercados”.
Sobre este porcentaje de petróleo que sale hacia el norte Quevedo señaló no entender por qué el mismo gobierno norteamericano, que no especificó, “ataca a la industria petrolera venezolana que es una fuente de suministro seguro”.
El Gobierno estadounidense aprobó el pasado agosto sanciones financieras contra el Gobierno venezolano de Nicolás Maduro y PDVSA por las que prohíbe a empresas estadounidenses negociar en deuda nueva emitida por el Estado venezolano y su petrolera estatal.
PDVSA ha sido declarada en suspensión de pagos por varias agencias financieras internacionales debido a sus retrasos en el pago de los vencimientos de varios de sus bonos y que Caracas achaca a las sanciones de Estados Unidos.
Además defienden que la caída de la producción se debe, entre otros motivos, a la corrupción dentro de la empresa.
En una supuesta campaña contra esta presunta corrupción, más de 60 personas, incluidos dos expresidentes de PDVSA, han sido detenidas.
Para luchar contra estas prácticas fraudulentas Maduro nombró en noviembre pasado al mayor general Manuel Quevedo como nuevo ministro de Petróleo y presidente de PDVSA.
Durante el mandato del difunto presidente Hugo Chávez la empresa se endeudó masivamente buscando aumentar la producción a 6 mbd.