Es de su interés
“Un cirrus o cirro es un tipo de nube compuesto de cristales de hielo y caracterizado por bandas delgadas, finas y acompañadas por copetes”, dijo la entidad en un comunicado.
Indicó que en ocasiones estas nubes son tan extensas que no pueden distinguirse unas de otras, formando una hoja o velo llamado cirrostratos.
“Ciertas veces la convección a grandes altitudes producen otra forma de cirros llamadas cirrocúmulos: un patrón de pequeñas nubes en copetes”, fenómeno que pudo observarse en el cielo este jueves.
Según el Insivumeh, la presencia de muchas nubes cirrus en el cielo pueden ser una señal de un frente frío “o que una perturbación de las capas altas se aproxima”.
Precisamente este jueves ingresó a Guatemala el séptimo frente frío, lo cual generó la aparición de nubes que al ser calentadas por el Sol se transformaron en cirrocúmulos, es decir, pequeñas nubes en copetes de distintos matices.
“Los cirros también pueden ser remanente de una tormenta. Grandes capas de cirros y de cirroestratos típicamente acompañan los flujos en alta altitud de huracanes y tifones”, señaló el ente científico.
Desde su ventana, vehículo o mientras caminaban, muchos guatemaltecos captaron imágenes del fenómeno y las presumieron en sus cuentas de redes sociales.
Mito
Édgar Castro Bathen, presidente de la Asociación Guatemalteca de Astronomía y director del Instituto de Investigación de Ciencias de la Tierra y Astronomía de la Universidad Galileo, coincidió en que “los altocúmulos frecuentemente preceden un frente frío”.
El experto también dijo que en Guatemala existe la creencia que nubes de ese tipo anuncian un temblor o un terremoto, lo cual no tiene fundamento científico.
Castro Bathen recordó que previo al terremoto de 1976 hubo un fenómeno de nubes similar y por ello se acentuó el mito, pero que no hay ninguna relación entre la forma de las nubes y el origen de un sismo.
Sobre el fenómeno de este jueves explicó que su nombre científico es altocúmulos, que son “nubes de media altitud, caracterizada en estratos, capas, o parches con masas en ondas, formas acigarradas de color blanco”.
El astrónomo mencionó que algunas personas les dicen nubes “ovejitas” o “borreguitos”.
Viento aumenta
El frente frío que afecta al país ha incrementado la velocidad del viento hasta los 50 km/h y, según el Insivumeh, puede ser más veloz en regiones montañosas o con cañones.
Estas condiciones climáticas persistirán durante las siguientes 24 a 48 horas, por lo no se descarta que nuevamente se presente el fenómeno de las pequeñas nubes en el cielo.
Al aire frío también podría causar que los nublados estén acompañados de lloviza e incluso lluvia en la región norte y centro del país.
Según los pronósticos, la temporada de frío terminará a mediados de marzo.