Paul Bocuse est mort, la Gastronomie est en deuil.
Monsieur Paul, c’était la France. Simplicité & générosité. Excellence & art de vivre.
Le pape des gastronomes nous quitte. Puissent nos chefs, à Lyon, comme aux quatre coins du monde, longtemps cultiver les fruits de sa passion. pic.twitter.com/XI0ozzzGJK— Gérard Collomb (@gerardcollomb) January 20, 2018
El presidente francés, Emmanuel Macron, ensalzó a Bocuse calificándolo como “la encarnación de la cocina francesa”. Según Macron, “tan solo su nombre resumía la gastronomía francesa en su generosidad, su respeto a la tradición y también su ingenio”.
Paul Bocuse n’est plus là. Les chefs pleurent dans leur cuisine, à l’Élysée et partout en France. La gastronomie française continuera à le rendre fier. https://t.co/gm7M9ztBua
— Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) January 20, 2018
La gastronomía francesa ha perdido a “una figura mítica que de una gran manera ha dejado su impronta en ella”, escribió Macron. Todos los cocineros lloran su muerte, “en el Elíseo y en toda Francia, pero ellos continuarán su trabajo”, afirmó el jefe de Estado francés.
“Hasta los últimos días de su vida nunca dejó de transmitir su conocimiento, adiestrando a nuevas generaciones de chefs franceses y extranjeros, vigilándolos como un padre”, señaló el presidente.
Disney
Bocuse firmó en 2014 un contrato con Disney para ser el anfitrión de una atracción en el parque de diversiones Disneyland París inspirada en la película Ratatouille.
Bocuse solía recibir a los asistentes junto a Remy, la rata chef especialista en crear maravillosos platillos gurme. La alianza fue clave en la campaña para promocionar la nueva atracción, en la cual se invirtieron US$150 millones.
Momentos clave
Bocuse fue aprendiz en el restaurante de Lyon de la primera mujer con tres estrellas Michelin, Eugénie Brazier, discípulo también de Fernand Point, su “mentor”, Bocuse transformó el albergue familiar de Collonges-au-Mont d'Or en un templo de la gastronomía.
Por su arte culinario, Bocuse fue distinguido entre 1958 y 1965 con tres estrellas Michelin que nunca perdería. El chef francés fundó más de 20 restaurantes, algunos de ellos en Estados Unidos y en Japón. Se calcula que llegó a acumular un patrimonio de 50 millones de euros.
La guía gastronómica “Gault&Millau” llegó a llamar a Bocuse el “chef del siglo”. Su restaurante de tres estrellas “L'Auberge du Pont de Collonges” era considerado un lugar de peregrinación para gourmets de todos el mundo. El chef se erigió mucho más allá de su natal Francia en icono de un modo de vivir refinado con comidas y bebidas exquisitas.
Bocuse fue uno de los fundadores de la “Nouvelle Cuisine”, un movimiento de jóvenes cocineros que en su día quería quitar el polvo de la cocina francesa. Una preparación sencilla, ingredientes frescos y productos regionales eran las tres reglas básicas.
En su libro “Paul Bocuse, le Feu sacré” (Paul Bocuse, el fuego sagrado), que se publicó en 2005, el chef se definía a sí mismo como un adepto de la cocina tradicional que “ama la mantequilla, la nata y el vino” y no algo así como “pequeños guisantes partidos en cuatro partes”. Su trabajo era su vida: “Trabajo como si viviese 100 años y disfruto de la vida como si cada día fuese el último”.