“Altos niveles” de violencia en Latinoamérica, críticas a España
La organización denunció, en su capítulo sobre las Américas, que “la discriminación y la desigualdad continuaron siendo la norma por todo el continente”.
“Los altos niveles de violencia siguieron asolando la región, con oleadas de asesinatos, desapariciones forzosas y detenciones arbitrarias”.
Los defensores de los derechos humanos sufrieron “crecientes niveles de violencia” y la “impunidad se mantuvo”.
La organización señaló en particular la extrema violencia que se vive en Brasil, El Salvador, Honduras, México y Venezuela, y calificó como “preocupante” el perdón concedido por Perú a su expresidente Alberto Fujimori.
En el caso de Venezuela, Amnistía estimó que el país afronta “una de las peores crisis de derechos humanos de su historia reciente, alimentada por una escalada de la violencia promovida por el gobierno” de Nicolás Maduro.
“Más que abordar la crisis de alimentos y sanidad, las autoridades (venezolanas) instituyeron una política premeditada de represión violenta de cualquier forma de disidencia”.
En México, más de 34.000 personas siguen desaparecidas y “las ejecuciones extrajudiciales fueron abundantes”, además de la tortura y los malos tratos.
La organización saludó “el potencial paso adelante” tomado por el Senado mexicano con la aprobación de una ley para combatir e investigar las desapariciones.
En el caso de Brasil, Amnistía condenó la violencia policial en Río de Janeiro y el aumento de las violaciones de los derechos humanos en el resto del país.
El informe también reservó críticas para el gobierno español de Mariano Rajoy por su tratamiento del desafío independentista en Cataluña.
“Los derechos de libertad de expresión y reunión pacífica de los partidarios de la independencia de Cataluña fueron desproporcionadamente restringidos”, asegura el informe, citando en particular la respuesta policial al referéndum ilegal de independencia del 1 de octubre deL 2017.