LE PUEDE INTERESAR:
1. Existe capital de riesgo disponible para invertir:
Hace una década, levantar capital era mucho más difícil, ahora existen múltiples fuentes de financiación y hay más capital disponible.
En el 2011 Latinoamérica recibió US$143 millones de inversión en emprendimientos, US$500 millones en 2015, US$1 mil 141 millones en 2017 y US$1 mil 976 millones en 2018. Un aumento de inversión de más del 1000% en ocho años. Lo mejor es que este aumento aplica no solo para Brasil, mayor beneficiado históricamente, sino también para Colombia, México y Chile.
Es cierto que el grueso de la inversión se ha concentrado en financiación de startups unicornios, pero existen nuevos fondos de etapa temprana que quieren dejar su huella y están dispuestos a financiar emprendedores en etapa temprana. Fondos como Maya Capital y Canary en Brasil, Magma Partners en Chile y México han hecho un gran trabajo, además de fondos reconocidos como Kaszek, Monashees, ALLVP, Valor Capital, quienes cada vez están invirtiendo más en la región.
2. Los grandes referentes han creado un blueprint:
El desarrollo del ecosistema de un país aumenta dramáticamente cuando un startup llega a un nivel de éxito tal, que actúa como un catalizador. Este ‘gran campeón’ le demuestra a todos los actores del ecosistema lo que se puede lograr. Es gracias a este efecto que ecosistemas como Brasil y Argentina se desarrollaron primero, de la mano de TOTVS y Mercado Libre, y ahora tenemos nuevos ‘campeones’ en Colombia, México y próximamente Chile.
En cada uno de estos países, los ´’campeones’ actúan como un factor multiplicador. Le muestran la hoja de ruta a otros fundadores, partners e inversionistas, entrenan talento y dejan lecciones para tratar de replicarlos. En Brasil tenemos a Nubank, Loggi y Gympass; en Chile y México a Cornershop; y en Colombia a Rappi. Estos emprendimientos ponen a sus respectivos países en el mapa y son la razón principal del aumento de inversión.
3. Mayor acceso a la información:
Crear un startup es una experiencia única, y lo que impulsa a crecer en unos casos no aplica en otros. Sin embargo, existen mejores prácticas para pasar de una idea a una empresa de crecimiento vertiginoso.
Si nunca has emprendido, existen innumerables recursos para aprender las bases tanto privadas como gobiernos y ONGs. Uno de mis favoritos es Startup School de Y Combinator, la reconocida mundialmente, donde te enseñan las bases y el programa es gratuito. También hay iniciativas como Innpulsa en Colombia, donde recibes excelente acompañamiento.
Aunque es evidente que estamos en un gran momento para emprender, no desconozco que fundar empresas es una quijotada. Los problemas que enfrentas son gigantes, dormirás pocas horas, el nivel de estrés es muy alto y los sacrificios innumerables. Pero, crecerás profesionalmente a un ritmo inimaginable y tendrás impacto real resolviendo los grandes problemas que afectan a nuestra sociedad. No se me ocurre algo mejor que hacer con la vida.
Así que si lo estás pensando, da el salto, no te arrepentirás!
* En alianza con Forbes México y Centroamérica.
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