Salah, autor de 44 goles para el Liverpool en la mejor temporada de su carrera, cayó en mala posición a los 25 minutos tras una pugna con Sergio Ramos.
Fue atendido sobre el césped con claros gestos de dolor y, tras reincorporarse a la final, al minuto se dejó caer desolado por el fuerte dolor que le impedía continuar.
Se retiró entre lágrimas del partido más importante de su carrera, con el miedo añadido de poder perderse el Mundial en función de la gravedad de la lesión de hombro que sufra y dejó su sitio a Adam Lallana a la media hora del duelo, aunque después del partido confirmó a su familia que podrá estar en Rusia.
Contenido relacionado
> Sergio Ramos lesiona a Mohamed Salah en la final de la Champions League
> Dua Lipa enamora y sorprende en Kiev con su espectacular presentación
> Cristiano gana su quinta Champions pero, ¿dejará el Real Madrid?