Frente a los nórdicos, los pupilos de Gareth Southgate volvieron a aprovechar esa estrategia con el tanto que abrió el marcador, un cabezazo del defensor Harry Maguire a la salida de un córner en la primera mitad (30).
El zaguero del Leicester aprovechó sus 194 cm de estatura para volar por encima de sus homólogos suecos y adelantar así a los suyos en la contienda.
En la segunda mitad, otro testarazo de Dele Alli a los 59 cerró el marcador.
Con el de Maguire, Inglaterra logró su cuarto gol de córner en Rusia-2018 que, sumado a los tres de penal de Harry Kane, a un remate de falta y a otros tres de jugada colectiva, han convertido a esta generación en la más goleadora de su historia en la competición con 11 tantos, igualando su mejor marca lograda en 1966 cuando se consagraron campeones por primera y única vez, en su propio territorio.
El crédito en ese tipo de jugadas es para Allan Russell, quien trabajó en categorías inferiores en Escocia, Inglaterra y Estados Unidos antes de ser contratado por Southgate como asistente para entrenamientos específicos de los delanteros y que ha adaptado estrategias utilizadas en la NFL y la NBA.
“Ha traído muchas ideas nuevas en dos años. Ahora estamos viendo los resultados”, había dicho el defensa John Stones en la previa.
Un equipo completo
Pero Inglaterra ha demostrado en Rusia que es mucho más. La formación de Southgate, una de las más jóvenes del torneo, se ha visto potenciada por su fortaleza táctica, con un 3-5-2 en el que sus zagueros se han mostrado casi imbatibles y su delantero, Harry Kane, aterroriza a las defensas rivales.
Te puede interesar: Luka Modric no juega al futbol, lo predice.
No en vano, el ariete del Tottenham es el máximo artillero de la competición con seis goles.
Suecia llegaba a los cuartos con la estadística de su lado: en ocho encuentros oficiales entre ambos, los nórdicos solo habían perdido uno.
Además, para llegar a esta instancia, habían dejado por el camino a Holanda en la fase de clasificación, a Italia en los “playoffs” de repesca y a Alemania en el Grupo F, que lideró a pesar de caer (1-2) ante la vigente campeona.
Con un juego basado en su físico y su poderío a balón parado, los hombres de Janne Andersson le entregaron la pelota a sus contrincantes y esperaron.
Encerrados, aguardando salir al contragolpe, Suecia cedió la iniciativa y lo acabó pagando.
Kane probó fortuna primero con un disparo lejano que rozó el poste a los 19 minutos y Maguire, poco después, no perdonó, llevando el júbilo a un país que lleva casi tres décadas esperando una oportunidad como ésta.
Cuando el descanso parecía ya un hecho, Raheem Sterling disfrutó de un mano a mano ante Robin Olsen que no supo definir: el atacante del Manchester City trató de driblar al arquero pero no lo logró y su posterior remate se estrelló en la pierna de un zaguero.
Pickford, un muro inexpugnable
Si en un arco las jugadas a pelota parada han sido decisivas, en el otro las actuaciones de Jordan Pickford han sido igualmente determinantes.
El portero del Everton acabó con la maldición mundialista en tandas de penales de su país ante Colombia en octavos (1-1, 4-3) y, este sábado, volvió a brillar cuando su equipo más lo necesitaba.
Tras el paso por vestuarios, Suecia salió a remontar y, así, Marcus Berg estuvo a punto de certificar la igualada a los 47 con un remate de cabeza que salvó Pickford.
Lee también: Neymar acompaña a Cristiano y Messi en el adiós prematuro.
Dele Alli hizo a continuación el 2-0, también con la testa (59), y los nórdicos pudieron recortar distancias hasta por dos ocasiones justo después (62). Pero se encontraron a Pickford por dos veces.
El guardavallas inglés fue un muro inexpugnable para sus rivales, que siguieron intentándolo y se toparon siempre con sus guantes.
Ahora, Inglaterra aguarda expectante a su rival para la penúltima instancia, que saldrá del ganador del último juego de cuartos entre la anfitriona Rusia y Croacia.
Contenido relacionado
> Bélgica devora a Neymar y compañía y se mete en semifinales.
> El niño que refleja la tristeza de Uruguay y conmueve al mundo.
> Mbappé es el blanco de los memes en el partido Francia – Uruguay.