“Pierde un poco la magia de la final, honestamente prefería que se jugara allá, pero por otro lado tengo la oportunidad de venir a verlo, que allí no habría podido ir a la cancha”, afirma este joven, que regenta con su hermano un comercio familiar en Buenos Aires.
Al igual que Cristian, Facundo Lasarte también se muestra contento de poder asistir al encuentro del domingo, tras pasar tres horas en el ordenador tratando de lograr una entrada que finalmente logró.
“La gente va a venir a disfrutar una ocasión única”, asegura este joven estudiante de publicidad, que llegó a España cuando contaba ocho años de edad con su familia.
Aclamados
Facundo se une a sus compañeros de afición a la puerta del hotel Mirasierra, donde una cincuentena de hinchas aclaman a sus ídolos de Boca que saludan brevemente, mientras pasan rápidamente del autobús al hotel.
Boca empezará a preparar el partido del domingo el jueves en los campos de la Ciudad del Fútbol, en Las Rozas, a una veintena de kilómetros al noroeste de Madrid, donde habitualmente entrena la selección española.
El equipo argentino espera a su rival, que partió este miércoles de Argentina despedido por un pequeño grupo de hinchas con rumbo a Madrid donde está previsto que llegue en la madrugada española.
River se pondrá al trabajo en cuanto llegue, ya que tiene previsto un primer entrenamiento de cara a la final en las instalaciones del Real Madrid, en Valdebebas, a las 17h00 GMT.
River y Boca empezarán así a preparar un partido que los aficionados esperan que tenga un ambiente festivo alejado de los incidentes que provocaron la suspensión del partido y su traslado a Madrid el pasado 24 de noviembre cuando un grupo de 'barras bravas' de River atacó a pedradas al autobús que trasladaba a los jugadores de Boca.
¡El plantel llego a Madrid! Vamos equipo 👊🏻 #QueremosLaCopa 🏆 pic.twitter.com/qfJzpFqmOR
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Partido seguro
“No habrá problemas, va a haber más controles”, dice Cristian, que afirma confiar en la policía española, que tiene previsto un fuerte dispositivo para garantizar la seguridad de los miles de aficionados que llenarán el Bernabéu.
El lunes, Boca y River pusieron a la venta las 5 mil entradas de las que dispone cada club para los residentes en Argentina.
En España, 20.000 entradas suplementarias para hinchas que viven en el extranjero se vendieron en pocas horas, declaró a la AFP una fuente cercana a la organización.
Otras 20.000 para aficionados de Boca se pusieron a la venta el martes desde las 19h00 GMT.
Sin embargo, las 81.000 localidades del estadio Bernabéu no estarán todas ocupadas, ya que habrá una zona vacía para separar ambas aficiones, según esa misma fuente.
“Tenemos la oportunidad de estar las dos hinchadas, va a ser una linda fiesta”, asegura Agustín Giacone, otro hincha de Boca llegado este miércoles desde Argentina para ver el partido, seguro de que no se repetirán los problemas ocurridos a las afueras del estadio Monumental.
“Los argentinos no quieren ensuciar más el nombre de Argentina”, afirma este joven de 21 años, vestido con la camiseta de su equipo y tocado con una gorra negra.
Así llegaba el plantel a Madrid. #QueremosLaCopa 🏆pic.twitter.com/DQfelJdFIL
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