POR LA LIBERTAD
Diez prioridades para este nuevo gobierno
El CEES (Centro de Estudios Económico Sociales) publicó el día de la toma de posesión del nuevo gobierno cuáles deberían ser las 10 prioridades a modo de poder alcanzar más rápidamente un mejor nivel de vida para todos los habitantes del país.
' La seguridad va de la mano con la justicia y tiene que ver con la defensa irrestricta de los derechos individuales.
Ramón Parellada Cuadrado
Primera: Seguridad y justicia. La seguridad va de la mano con la justicia y tiene que ver con la defensa irrestricta de los derechos individuales: a la vida, a la propiedad y a la libertad. La recuperación de la certeza jurídica, la consecución de un verdadero Estado de Derecho y la despolitización de la justicia son esenciales para ello.
Segunda: Respetar la propiedad privada de los trabajadores. A los trabajadores se les confisca parte de sus ingresos y ahorros para lo que otras personas creen que les conviene más a ellos. Se les deben devolver sus pertenencias y que decidan qué hacer con su dinero.
Tercera: Eliminar el impuesto sobre la renta y reducir el gasto del gobierno. El ISR es el impuesto que más afecta la capitalización de inversiones productivas. En un país con tanta urgencia para crear valor y oportunidades para los guatemaltecos más pobres, este impuesto es una contradicción.
Cuarta: No más endeudamiento. La deuda de Guatemala es impuesto diferido. La deuda oficial estaba en 2017 en 25% del PIB. Pero, en realidad, al sumarle la deuda que el Gobierno le debe al IGSS y al Banco de Guatemala asciende al 37% del PIB. El Gobierno debe reducir los gastos y equipararlos al nivel de los ingresos tributarios.
Quinta: Liberar el mercado laboral. Si queremos que los más pobres tengan más oportunidades hay que liberar el mercado laboral y eliminar todas sus rigideces. Mientras exista en el interior gente que no gana nada porque no halla trabajo, no se pueden imponer trabas a cualquiera que llegue a ofrecer algo que les permita tener algún ingreso.
Sexta: Simplificar los trámites administrativos y descentralizar la administración pública. Para un país pobre, crecer 3.5% del PIB es seguir en la pobreza. Se debe triplicar ese crecimiento cuanto antes. Descentralizar, desregular y eliminar o agilizar todos los permisos, licencias y trámites burocráticos que retrasan las actividades productivas es esencial.
Séptima: Devolver a los padres la responsabilidad de la educación de sus hijos, liberándola del control estatal. Se debe eliminar la camisa de fuerza del Mineduc. El sistema tradicional es rígido y obsoleto. Responde a la presión de sindicatos y no a las necesidades de los padres de familia. Son estos los que deben velar por la educación de sus hijos y escoger libremente entre todas las alternativas modernas.
Octava: Devolver a las personas el derecho que tienen al subsuelo. Para eliminar la polarización y los conflictos en relación con las actividades extractivas, se debe devolver la propiedad del subsuelo a los dueños de las superficies de sus propiedades. Solo así el dueño decidirá si se explotan o no los recursos naturales bajo su propiedad.
Novena: Apertura al comercio exterior. Una forma inmediata de incrementar los ingresos reales a los más pobres es eliminar las barreras al comercio exterior. Los países que se han abierto al comercio exterior han logrado mayores niveles de competencia interna y eficiencia. Han logrado bajar los precios de todos los productos, en especial de los alimentos.
Décima: Despenalizar las drogas. Lo ideal sería que todas se despenalizaran para acabar con el negocio criminal que nos genera tanta corrupción y violencia.