De acuerdo con los vecinos, más de cien familias son afectadas por la contaminación causada por los peces muertos, pues desde hace una semana aparecen en ese lugar, donde, además, proliferan las moscas.
“Estamos preocupados. Los niños son los más afectados porque están propensos a enfermedades estomacales”, expresó Marina de León, quién reside en el barrio Monterrey.
Los pobladores aseguran que la mortandad de peces se debe a que algunos pescadores utilizan productos químicos para extraer los peces con facilidad en otros sectores del afluente.
“No es la primera vez que sucede, es una pena que no se tenga consideración por quienes vivimos en estos lugares ni por las personas que utilizan el agua del río”, agregó Pedro Solís, uno de los vecinos afectados.
“Es lamentable que después de una semana se hagan las denuncias, daremos seguimiento con las instituciones respectivas, mientras tanto haremos una verificación de campo para conocer en dónde se originó -la mortandad-“, dijo Benjamín Meneses, inspector ambiental del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales.