Salubristas en Huehuetenango denunciaron que el Área de Salud distribuyó dos mil cascarillas “sencillas” como si se tratara de las famosas N95, varios empleados no aceptaron el protector porque el material de protección no corresponde a tipo mascarillas que les prometieron entregar.
El Colectivo Departamental de Auditoría Social de Huehuetenango denunció a través de las redes sociales el caso, explicaron que Salud entregó dos mil mascarillas a personal de los distritos para protección durante la actual emergencia del coronavirus; sin embargo, el material de la mascarilla, según médicos, no es de calidad; empleados devolvieron los tapabocas.
Manolo Ordóñez, coordinador del colectivo, detalló que se enteraron del caso porque personal de salud denunció que les entregaron un tipo de mascarilla, pero en el documento que les hicieron firmar decía que eran N95.
Para Ordóñez, el caso es “una estafa” y Salud habría incurrido en la comisión delitos cuya responsabilidad subrayó debe investigar el Ministerio Público.
Hallazgos
Érick Villatoro, auxiliar de la PDH, informó que abrió un expediente que incluye documentos y testimonios del personal médico. Para el auxiliar de conciencia la pesquisa cuenta con evidencia que podría respaldar que hubo irregularidades en la compra de dos mil mascarillas por un monto de Q1 mil 200, según el portal Guatecompras.
La compra se efectuó el 14 de noviembre de 2019, –cuando no sabía nada de la pandemia en el país–, según Salud, fue una compra de baja cuantía. La empresa que ganó el concurso fue Multiproductos Hospitalarios e Industriales, Sociedad Anónima; en la descripción del producto se detalla que son mascarillas con válvula y filtro N95 con elásticos de la marca Operson.
“Al menos 500 mascarillas fueron devueltas a el Área de Salud porque el personal se dio cuenta que no son de la calidad que se necesitan; el resto se vio obligado a usarlas”, expresó Villatoro.
El defensor del pueblo mencionó que varios empleados de Salud fueron amenazados para recibir el material médico.
“Se abrió un expediente de oficio porque al personal se les estaba haciendo entrega de mascarillas N95, cuando la realidad son mascarillas de una calidad muy baja”, dijo.
Según la PDH, el producto cuenta con certificado de calidad que respaldan la compra; sin embargo, “no se necesita ser experto para saber que lo que se distribuye no corresponde a la calidad”.
“Cuando destapan las cajas el personal se da cuenta que no son de la calidad que se estableció, nos preocupa porque se pone en peligro al personal que evaluará a pacientes sospechosos –de covid-19– con un equipo que no es el adecuado. Se debe establecer la responsabilidad contra quien pudo participar en esta compra, en las cajas hay calcomanías sobrepuestas donde están las especificaciones relacionadas al certificado de N-95 y dentro de las cajas hay producto sencillo de muy baja calidad”, dijo.
La PDH solicitó a Salud suspender el uso de las mascarillas del personal en Huehuetenango, pero la petición no tuvo eco.
La Procuraduría abrió otro expediente por no brindar el equipo básico de protección que incluye batas, guantes, mascarillas, alcohol en gel y otros insumos.
Personal de salud que pidió no ser citado, confirmó desde el comienzo de las medidas de contingencia, carecen de insumos para atender a la población.
“Solo tenemos mascarillas quirúrgicas, pero no hay N-95, no tenemos termómetros a pesar del riesgo para el personal”, denunció.
Carmelino García, director del Área de Salud, manifestó que ellos cuentan con toda la documentación que respalda la compra, respecto a la calidad del producto dijo que tienen un certificado de calidad.
“Nosotros no somos expertos para establecer si son N95 las mascarillas o no, enviamos una muestra al laboratorio nacional para que ellos den un dictamen y depende de eso para tomar acciones”, dijo.
Agregó que se suscribió un acta para devolver el producto en total fueron 500 mascarillas, el resto el personal aceptó lo que se les entregó. “Estamos pendientes del informe si es o no, esperamos esos resultados para presentar la denuncia porque como médicos no tenemos la facultad de hacer eso”.