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Por ello consideran vital que la novena legislatura solvente las deficiencias que tuvo en estos primeros seis meses de trabajo, principalmente no contar con una agenda de trabajo que permitiera aprobar paquetes de leyes en pro de alguna necesidad o problema.
Así lo expuso la Alianza por un Congreso Eficiente, que aglutina al Cien, Guatemala Visible y a Fíjate Bien, quienes señalaron que de 21 decretos aprobados 14 fue para la ratificación y prorroga de medidas de excepción mientras que solo siete fueron proyectos de ley que venían arrastrados de la pasada legislatura.
El trabajo dentro del Palacio Legislativo comenzó a estancarse cuando comenzaron los primeros casos por coronavirus, en donde si hubo aprobación de leyes relacionadas con la pandemia hubo otras de igual importancia que quedaron a un lado y no han sido retomadas.
“Normas con el teletrabajo y trabajo a tiempo parcial, que pasa con las contrataciones públicas, si bien hay muchas iniciativas y proyectos de reformas a la ley de contrataciones fue un tema importante que debió abordarse en este primer semestre”, manifestó María Isabel Bonilla, investigadora del Cien.
Pero el que los diputados tuvieran una reducción de actividades no se vio reflejado con un ahorro de gastos, su presupuesto se ha ido ejecutando de la misma manera que años anteriores, según expuso el informe.
Leyes clave
La responsabilidad que tienen los diputados es grande, deben verificar que proyectos están pendientes de dictamen o que incluso se han presentado en Dirección Legislativa que permitan dar solución a uno de los principales problemas que está dejando la pandemia: crisis económica.
“La mayor dificultad será sin duda alguna la reactivación económica, la consigna será que muchos van a apoyar y creo yo que es el momento de demostrar esa unión nacional de la que tanto se habla y que es necesaria en estos momentos de crisis, es necesario generar leyes que motiven la inversión nacional”, argumentó Emilio Ruíz, analista político de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies).
Otros temas que no pueden quedar de lado serán proyectos de ley destinados a la salud y educación de lo contrario, según Heidy de Matta, directora del Instituto de Problemas Nacionales de la Usac (Ipnusac), podrían generar descontento social.
“El hambre, la pobreza extrema y la seguridad van a tener un reto significativo, creo que lo importante es poder atender las demandas insatisfechas y el nivel de conflictividad social que se puede generar en el Estado de Guatemala si no se tiene la visión estratégica de ir resolviendo esas desigualdades”, precisó.
De 99 iniciativas de ley que fueron presentadas únicamente 23 fueron trasladas a comisiones de trabajo para su evaluación y de las 23 sesiones plenarias celebradas solo 25 diputados asistieron a todas, incluso el congresista Armando Melgar Padilla tan solo llegó el día de la juramentación.
