Política

Cae aprobación del presidente Alejandro Giammattei por el manejo de la pandemia

Estudio muestra disminución de la aprobación de la forma en que Alejandro Giammattei ha manejado la emergencia del covid-19 en Guatemala.

El presidente Alejandro Giammattei informa sobre el avance en seis meses de gobierno.  (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

El presidente Alejandro Giammattei informa sobre el avance en seis meses de gobierno. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

La aprobación a la forma como el presidente Alejandro Giammattei ha manejado la crisis por el nuevo coronavirus parece ir en picada, y la cuarta encuesta elaborada por ProDatos en los primeros días de julio refleja una disminución de 21 puntos porcentuales respecto de la medición anterior, entre quienes estaban “muy de acuerdo” con el gobernante.

Esta caída es la más drástica desde que se mide la variable, que comenzó en 83 por ciento, en abril.

Al mismo tiempo, también disminuye del 28 al 20 por ciento el porcentaje de encuestados que están “algo de acuerdo” con el manejo de la crisis, y se eleva hasta el 31 por ciento la cifra de guatemaltecos entrevistados que están “poco o nada de acuerdo”.

El descenso de la aprobación es inversamente proporcional al incremento de contagios de las últimas semanas, cuyas cifras en los días de la medición rebasaban los 23 mil casos positivos y los decesos se aproximaban a mil.

Sin embargo, aunque la desaprobación no muestra diferencias tan abruptas cuando se comparan los datos entre grupos etarios, no sucede lo mismo cuando la gestión gubernamental es evaluada por nivel socioeconómico.

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Razones

Así, mientras los niveles medio y bajo muestran números similares, de 52 y 57 por ciento, respectivamente, entre quienes están “muy de acuerdo” con la actuación del Gobierno en la pandemia, la cifra se reduce hasta 9 por ciento cuando se entrevista a los guatemaltecos de un estrato socioeconómico alto.

Los encuestados creen que Giammattei “ha aflojado las medidas” y que es “menos estricto”, aunque por primera vez mencionan el “robo” y la “corrupción” como factores de desaprobación.

También se cuestionan las “inconsistencias” en los datos: el porcentaje de quienes creen que las cifras oficiales son “poco o nada creíbles” también ha aumentado desde abril. En ese período el Gobierno ha reconocido incongruencias en las cifras y practicado al menos una auditoría y ajustes de datos.