Hay diferencias entre pasar una mala noche y tener un problema de sueño, hablaré del primer caso, en el que ocasionalmente por estrés, ansiedad o malos hábitos se altera el buen dormir. Si lleva más de una semana con problemas de sueño debe visitar a su médico para que evalué el caso e identifique qué lo está alterando.
El mundo actual en el que corremos todo el día, cuando estamos cansados acudimos a bebidas energizantes o al café en grandes cantidades alterando el funcionamiento de dos sistemas muy importantes: el simpático y el parasimpático, los cuales son como el acelerador y el freno de nuestro cuerpo, que hacen parte el sistema nervioso autónomo y generan respuestas que todos hemos vivido.
En esos días en los que a pesar de haber dormido 8 horas nos levantamos cansados, esto se debe a que la cantidad de sueño reparador probablemente ha sido baja y hemos tenido una respuesta de estrés en nuestro cuerpo a pesar de estar dormidos. Cuando esto ocurre, activamos sensaciones de lucha y huida, alterando los niveles hormonales y cambiando los patrones fisiológicos básicos como respiración y frecuencia cardíaca, e incluso llegando a la apnea del sueño en algunos casos.
Estas situaciones son fruto de un sistema simpático hiperactivo, nuestro cuerpo está reaccionando como si un tigre estuviera a punto de atacarnos en el momento en que tenemos que responder un reto cotidiano, generando estrés y ansiedad diariamente.
El problema, es que la mayoría de las personas no conocen la contraparte de nuestra respuesta de lucha o huida: se llama respuesta de descanso y relajación, también conocida como la rama parasimpática del sistema nervioso autónomo. Ella nos permite descansar, recuperar la energía, estar en calma y enfocarnos, por lo que vale la pena aprender a activarla, ya que es vital para nuestra salud física y bienestar psicológico.
Entre otras cosas, esta rama es la encargada de regular el sueño,tener buena memoria, el estado de ánimo, reducir el estrés, mantener el peso estable y tener un buen rendimiento laboral, por mencionar algunos beneficios. Por lo tanto, necesitamos mejorar nuestra relación con el descanso para restaurar el equilibrio en nuestro organismo y poder sentirnos bien.
Necesitamos: descansar, recuperar la energía y ser productivos, en ese orden es como realmente funciona. Hay muchas pequeñas acciones que al sumarlas le pueden ayudar a estar mejor solo que requieren de esfuerzo sostenido, tomar mejores decisiones y decidir actuar diferente.
Lo primero es reconocer que en muchos casos, hemos olvidado cómo relajarnos y aquietar nuestras mentes y necesitamos aprender ¿cómo estar en calma?, para esto puede apoyarse en técnicas que han cambiado la vida de miles de personas en todo el mundo y que con un poco de dedicación usted también puede incorporar a sus estrategias para cultivar el bienestar.
El punto de partida: piense en su mente como un mar y conteste ¿cuál es el estado de su mente? calmada, agitada; ahora revise el contenido de esta: ¿qué ocupa su mente en este instante?pensamientos futuristas, quejas del pasado, divagaciones entre varias ideas, rumiación de preocupaciones, o le angustia el pensar en que si no duerme bien mañana estará muy cansado.
Tener claridad ante sus pensamientos le ayudará a elegir la técnica que más se ajuste a sus necesidades.
Micropasos
- Aprenda y practique ejercicios de relajación que le ayudarán a dormirse más fácilmente (respiración atenta, baños de agua tibia, disfrutar de una bebida de plantas aromáticas).
- Tenga horarios regulares para acostarse y cúmplalos.
- Reduzca la cafeína en la segunda mitad del día.
- Haga pausas para respirar lentamente y activar el sistema parasimpático.
- Evite mirar televisión o navegar por Internet en las dos horas antes de irse a la cama.
- Utilice una libreta para escribir todo lo que le preocupa antes de acostarse y cierre con “esto lo resolveré mañana) así su mente sabrá que no es hora de rumiar.
- Visualice el movimiento del mar en calma. Esta imagen induce muy bien el sueño.
- Practique la técnica 4-7-8 en la cual inhala contando hasta 4, sostiene el aire dentro contando hasta 7 y exhala lentamente contando hasta 8.
Mantener el equilibrio entre el tiempo que dedica a trabajar y en el que se recuperas es fundamental para tener tu cerebro en forma. La mejor forma de comprobar si estas técnicas funcionan es poniéndolas a prueba, así que lo invito a que las practique y vea cómo le ayudan a transformar su vida de manera positiva.
*En alianza con Forbes Colombia, artículo de Blanca Mery Sánchez.