Por ley, el período del presidente actual Carlos Contreras finaliza el próximo 3 de junio, y para los delegados de ambos sectores y analistas, es necesario empezar el proceso de manera transparente, con una etapa ordenada de transición.
Incluso hablan de que la elección sea por medio de una postulación para brindar una garantía del perfil de la persona nombrada, conocer sus cualidades, que tenga el conocimiento profesional y que no “genere” sorpresas de una persona no calificada o, en el peor de los casos, que cuente con un vínculo político, según la apreciación de los consultados por Prensa Libre.
La ley establece que el mandatario designa al director presidente del IGSS, pero desde que asumió su mandato Alejandro Giammattei, han existido roces en declaraciones públicas en contra de las actuales autoridades, sin aclararse o profundizarse sobre los motivos.
“Evitar compadrazgos políticos”
Tanto Alejandro Ceballos, vicepresidente de la Comisión de Vestuario y Textil (Vestex), como el sindicalista Rigoberto Dueñas expusieron que en este proceso debe existir la unificación de una propuesta en conjunto y elevarla al mandatario a su consideración.
Uno de los riesgos es que se puede designar a una persona con vínculos político-partidistas, que vendría a distorsionar el papel de la institución, lo que no contribuirá al robustecimiento, “ahora que se necesita ante los efectos del covid-19”, declaró Dueñas.
Recordó que, en otros años, se han nombrado a personas con vínculos políticos o compadrazgos, sin considerarse que la dirección de la Seguridad Social es “muy sensible”, y en esas ocasiones se han tenido malos resultados, por lo que ese es uno de los temores.
“Ojalá el presidente haga consultas al sector patronal y sindical para seleccionar al director presidente, porque al final de cuentas, el Instituto es financiado por patrones y trabajadores, y el Estado ahí es ausente; inclusive tiene dificultades en el pago de sus contribuciones” de vieja data, indicó.
“No es un botín, es dinero sagrado”
Ceballos recalcó que el IGSS es un ahorro de los trabajadores para su salud a futuro, por lo que hay que cuidar y prestar atención a este nombramiento.
Expuso que desde la visión del sector productivo se requiere que los trabajadores estén saludables, que tengan la sensación de tranquilidad y que la persona que llegue a ocupar el cargo próximamente tenga conocimiento en el manejo de seguros y una trayectoria respetable.
“Es un dinero sagrado de los trabajadores y los ahorros de la nación porque en Guatemala no se ahorra en nada”, destacó el directivo de Vestex.
El empresario mencionó que el perfil de la persona seleccionada debe contar con el pleno conocimiento de la institución, que entienda “que no es un botín”, y que no es un ahorro del Estado, sino de los trabajadores.
Al igual que Dueñas, Ceballos sugiere que lo ideal es que a empleadores y trabajadores se les permita escoger al presidente del IGSS, porque el mayor aporte es de estos, para su fondo de retiro y su seguro médico.
“Lo que pedimos al presidente es que entienda de qué trata el Seguro Social, no es una propiedad del Estado, sino que es un ahorro. Las personas se olvidan de que algún día van a llegar a envejecer y van a necesitar ese fondo de retiro y ese seguro médico”, puntualizó.
Marvin Flores, analista de Acción Ciudadana (AC), dijo que lo correcto es que los sindicatos y empleadores propongan una lista de profesionales con experiencia, conocimiento y dominio del tema de la Seguridad Social como una terna, ya que son los principales actores.
Perfil y retos
Para Luis Linares López, exministro de Trabajo y analista de la Asociación de Investigación de Estudios Sociales (Asíes), la presidencia del IGSS requiere de un perfil apolítico, que no tenga interés vinculado al tráfico de influencias, sobre todo con la industria y la comercialización de medicamentos, conocimiento comprobable de Seguridad Social, porque no se trata solo de Salud Pública, sino de la industria del seguro, como atribuciones básicas.
Además, debe continuar en la línea de trabajo en el plan estratégico institucional, y trabajar por lo menos en varios aspectos fundamentales:
- La extensión de coberturas en coordinación con el Ministerio e Inspección de Trabajo.
- La mejora en los servicios médicos hospitalarios.
- Sostenibilidad financiera del programa invalidez, vejez y sobrevivencia (IVS).
- Cumplimiento del Estado de las obligaciones pendientes o que se le conoce como el adeudo.
Flores añade que convocarse una selección de proceso técnico, con calificaciones que sean cuantitativas, ya que el IGSS es una entidad importante para la economía y para los trabajadores, sobre todo ahora con la responsabilidad de la vacunación por la pandemia.
Luces y sombras
Los consultados reconocen que uno de los principales logros de la administración de Contreras fue el ahorro en la adquisición de medicamentos, que realizó en conjunto con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops).
Lo anterior generó mayor confianza al uso de los recursos y la defensa de la autonomía de la institución cuando surgió la idea que el IGSS absorbiera la suspensión de los contratos de los trabajadores por la pandemia. Por otro lado, el manejo de la salud financiera y las reservas que se incrementaron de manera sostenida, según Linares López.
De las sombras de la gestión, el exministro añadió que, de 2018 a 2019 hubo un menor crecimiento de la población afiliada a pesar de que está el plan de expansión de cobertura, y no se amplió la cobertura de los hijos de siete años en adelante de los trabajadores afiliados.
Plan de inversiones
Hasta el 31 de diciembre del 2020, el monto del portafolio de inversión del IGSS era de Q40 mil 717.2 millones, con un crecimiento anual de Q2 mil 718.9 millones.
La operación representó un rendimiento anual de 7.1% por un monto de Q2 mil 467.9 millones, que fortalecieron las reservas.
Se informó que en el portafolio de inversión de la actual presidencia del IGSS, se obtuvo un crecimiento de Q13 mil 581 millones, que representó 50% de crecimiento.
La gestión de Contreras se inició con Q27 mil 135.9 millones.