La fase de explosiones y retumbos comenzó el viernes 5 de marzo. De acuerdo con el monitoreo, se reportan explosiones moderadas y fuentes de lava que elevan material incandescente entre 100 y 500 metros sobre el cráter.
Las altas temperaturas de los flujos de lava generan pequeños incendios en la vegetación de los alrededores. Por tal motivo, el Insivumeh recomienda a la Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres mantener protocolos de prevención en comunidades aledañas al volcán.
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Asimismo, se sugiere a la población limpiar los techos de sus casas ya que la ceniza dispersa puede ocasionar daños a la infraestructura.
El Insivumeh también recomienda mantener cerrado el Parque Nacional Pacaya ya que la actividad volcánica es alta.
Por último, a la Dirección de Aeronáutica Civil se le pide tomar precauciones con el tráfico aéreo ya que la ceniza puede elevarse hasta 3 mil metros sobre el nivel del mar.