CIVITAS
Ciudadanos empoderados, pero informados
Hace un año escribía la columna titulada “Seamos una mejor sociedad tras la pandemia”, cuando habían pasado apenas dos semanas desde la detección del primer caso de covid-19 en el país. Esta semana me cuestionaba, ¿lo somos?
Mucho ha cambiado desde el 13 de marzo 2020, en la escala mundial y a nivel país. El gobierno de Estados Unidos tiene un nuevo líder que sin duda traerá cambios en el manejo de las relaciones internacionales. Los países de la región se encuentran con delicadas condiciones macroeconómicas, con altos niveles de deuda pública y situaciones políticas un tanto complicadas.
Las elecciones legislativas y municipales de El Salvador recién pasadas generaron una alerta global por la concentración del poder del partido oficialista, al haber obtenido mayoría en la Asamblea Legislativa. La confabulación entre Ejecutivo y Legislativo para la toma de decisiones políticas puede ser la receta para el desastre. La nueva legislatura elegirá fiscal general, procurador de Derechos Humanos y magistrados de la Corte Suprema de Justicia y Corte de Cuentas. Esto es una bandera roja para la democracia regional.
' Somos microinfluencers de nuestro entorno y nos corresponde asumir la responsabilidad por nuestras opiniones y nuestras acciones.
Andrea Monzón
Honduras, a su vez, tendrá comicios generales este año, en los que se elegirán a los próximos gobernantes. Hoy se encuentran llevando a cabo las primarias y desde ya existe preocupación de distintos sectores por lo que el futuro pueda traer.
Guatemala, a pesar de los distintos intentos de bloqueo, finalizó esta semana los procesos de elección de magistrados que integrarán la nueva Corte de Constitucionalidad y asumirán el próximo 14 de abril.
Es así como las fuerzas políticas del hemisferio se reconfiguran desde Estados Unidos hasta el Triángulo Norte. Aunque hemos visto una participación masiva de la población en los procesos electorales estadounidenses y salvadoreños, así como acaloradas opiniones en Guatemala sobre los procesos para la integración de la próxima Corte de Constitucionalidad, ¿será que existe una adecuada comprensión de las consecuencias políticas y económicas que nuestras decisiones como ciudadanos conllevan?
Es imperativo que los ciudadanos tengan plena conciencia de que su decisión, su voto, su participación e incluso su opinión desinformada pueden generar impactos en el rumbo de los países y que en momentos en que apenas estamos saliendo a flote a nivel económico, un giro hacia el camino equivocado puede costarnos décadas de recuperación.
Y es aquí donde nuevamente hago el llamado a los ciudadanos a que seamos una mejor sociedad tras la pandemia.
Considero que vamos avanzando porque ahora existe mayor deseo de involucramiento político. Sin embargo, debe ser un involucramiento político informado. El empoderamiento ciudadano debe ir acompañado de información, de análisis, de entendimiento y formación de criterio. El ciudadano debe conocer la Constitución Política de la República, la Ley Electoral y de Partidos Políticos, así como las leyes cuyo conocimiento es indispensable para un actuar ciudadano responsable. Las buenas intenciones deben ir de la mano de las buenas decisiones y estas buenas decisiones solamente se lograrán conociendo los hechos, la verdad y la ley.
Debidamente informados lograremos refutar aquellas ideas o propuestas que son contrarias a los principios constitucionales, que atentan contra la independencia de los poderes del Estado y que ponen en riesgo la institucionalidad. Todos somos microinfluencers de nuestro entorno y como tales nos corresponde asumir la responsabilidad por nuestras opiniones y nuestras acciones. Si asumimos esa responsabilidad individual y logramos que permee con la colectividad, seremos una mejor sociedad tras la pandemia.