La ganadora de una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988, y ahora analista deportiva, aseguró que la hazaña de Martínez es extraordinaria porque se midió a atletas que incluso han batido marcas olímpicas en las últimas horas en Tokio 2020.
“Es extraordinario -la clasificación- sobre todo porque siendo dos semifinales muy rápidas, incluso, en la segunda Caeleb Dressel batió el récord a Kristof Milak, que le duró solo tres minutos”, explicó Poll, quien en 1988 ganó una presea de plata en los 200 metros libres con tiempo de 1:58.67 minutos.
Agregó: “Fue muy bueno el resultado del nadador de Guatemala. Ha tenido una mejoría increíble. Revisé su historial y ha mejorado sus tiempos increíblemente. Quiero reconocer que el Comité Olímpico Guatemalteco desde hace años hace esfuerzos por apoyar a sus atletas”.
De acuerdo con Poll cualquier nadador “sueña con llegar a una final. A veces hasta eso se cree que es muy fácil, pero el llegar a una final, tener el derecho de competir, que le llamen a uno por el nombre, es algo inolvidable. Indiferentemente en qué lugar quede, ya puede decir – Luis Carlos Martínez – que fue finalista en unos Juegos Olímpicos”.
Concluyó: “Felicidades para Guatemala. Vamos a esperar que, ojalá, pueda mejorar su tiempo y una o dos posiciones en esa final”.
Luis Carlos Martínez hace historia por Guatemala 🇬🇹
🏊🏼 El guatemalteco será el primer centroamericano en la historia en disputar una final de natación en unos #JuegosOlímpicos | #Swimming #Tokyo2020 pic.twitter.com/7YusaPEjLT
— Los Juegos Olímpicos (@juegosolimpicos) July 30, 2021
El tiempo de Luis Carlos fue de 51.30 en el heat de la semifinal 2. Fue el cuarto mejor de la competencia. Eso le valió la clasificación a la final que disputará este viernes 30 de julio a las 19:30 horas (de Guatemala).
Martínez competirá contra el estadounidense Caeleb Dressel, de 24 años; el húngaro Kristof Milak, 20; el búlgaro Josif Miladinov, de 18; el ruso Andrei Minakov, de 19; el suizo Noe Ponti, de 20; y el australiano Matthew Temple, de 22 años.
#RetoTokyo Sí, sí, siiiiii Luis Carlos Martínez se metió a la final olímpica de 100 metros mariposa. 😭🤩💪🏽🏊🏻♂️🇬🇹💙#PasiónPorGuatemala #NuestraMetaLosValores pic.twitter.com/neCZYKzLbf
— C O G (@COGuatemalteco) July 30, 2021
El documental
Luego del análisis de Poll el programa mostró el documental sobre Luis Carlos Martínez.
En él revelaron algunos extractos de la vida del atleta de 25 años que salió de Guatemala (por decisión personal) desde que tenía 16 años.
“Un día me voy a ir de aquí y haré cosas grandes”, contó su padre que le había dicho en algunas oportunidades Luis Carlos.
A los 16 años les dijo a sus papás que se quería irse de Guatemala y su entrenador, Juan de la Rosa Murillo, fallecido el año pasado en un accidente, que no podía hacer nada más por él. “Sáquenlo de Guatemala”, les sugirió.
Su padre explicó que él quería que Luis Carlos fuera futbolista, pero a los seis años le dijo que no. Entonces buscaron en qué deporte podría adaptarse y hallaron el agua, la natación.
Su mamá Claudia Méndez contó: “Lo fuimos a dejar a un centro de entrenamiento al sur de la Florida. Ahí lo dejamos y le dijimos: ahí nos vemos”.
Desde entonces enfocó su vida en su carrera y en su forma de vida dentro de la natación. Luego se cambió de centro de estudios y llegó a la Universidad de Auburn, Alabama, donde se involucró de lleno en el deporte y comenzó a alcanzar los logros que se había trazado desde niño.
En el documental Luis Carlos Martínez lloró al recordar a su mentor en la natación en Guatemala, el tico Juan de la Rosa Murillo. Fue él quien lo descubrió a los 11 años.
El entrenador murió atropellado en 2020. Martínez y sus padres lo recuerdan como la persona que hizo de Luis Carlos alguien bueno para el deporte y la vida.
La pérdida de su mentor fue dolorosa. “Yo estaba deprimido. Por semanas completas no había nadado. Antes de la pandemia, en febrero, hablé con un psicólogo. Pensé: ¿Qué me hubiera dicho? ¡Hey! La vida sigue”.
La medallista costarricense Sylvia Poll terminó haciendo alusión al entrenador y dijo que había marcado una historia no solo en Guatemala sino en Costa Rica, donde había formado a atletas de alto rendimiento.